El escenario de la celebración de la víspera de Año Nuevo en Times Square es el lugar más seguro del mundo, custodiado fuertemente por miles de agentes, incluida una unidad nueva especializada en contraterrorismo.
Sin embargo, China, Indonesia, España, Reino Unido, Brasil y Rusia, entre otros, también reforzaron sus operativos para prevenir cualquier posible ataque.
Se prevé que aproximadamente un millón de personas se reúnan en el centro de Manhattan para observar el descenso del globo de cristal Waterford, de 5,3 toneladas (11.875 libras).
Quienes acudan a la fiesta serán revisados en dos ocasiones con detectores de metales manuales: una vez cuando ingresen a la celebración por uno de los 14 puntos de acceso y otra vez cuando ingresen a espacios tipo corral donde deben permanecer.
Serán asignados miles de policías a las festividades. Los visitantes observarán equipos contraterrorismo fuertemente armados y perros detectores de explosivos. La multitud será vigilada por patrullajes en techos y desde helicópteros del Departamento de Policía de Nueva York, además de que agentes vestidos de civil se mezclarán con los fiesteros.