En México, la preparación de la población para evitar contagios de coronavirus llevó a incrementar la demanda de productos de higiene y enlatados hasta 616%, reveló un estudio de Nielsen México, compañía experta en medición y entendimiento del mercado.
En su Expediente Covid–19, los cubre bocas, atún enlatado, aromatizantes y limpiadores líquidos, fueron algunos de los productos con mayor crecimiento durante la semana del 2 al 8 de marzo, período en que el país reportaba solamente siete casos confirmados y los pronunciamientos por parte del gobierno se concentraban en procurar medidas de higiene.
El documento precisa que en ese momento, había una demanda de 145% en cubre bocas y luego de que la Organización Mundial de la Salud (OMS) la hiciera oficial ante los contagios, ésta creció hasta alcanzar 616%.
En el caso del atún pasó de 0% a 13%; el puré o caldo de tomate de 8% a 26%; los aromatizantes de 10% a 28%; los frijoles procesados de 5% a 14%; el frijol no procesado de 17% a 24% y los frijoles no procesados de 17% a 24%.
Sobre el comportamiento de los precios, detalló que para la semana siguiente, correspondiente al 8 de marzo, los productos de despensa denominados «Pantry Replacement», que ocupan 93% del canasto COVID-19, aumentó 6% en valor en el acumulado de las últimas tres semanas (semana 8, 9 y 10).
El resto de las categorías medidas por Nielsen tiene un decremento de 2% en el acumulado. Así mismo, la compañía detectó que el canal tradicional comienza a presentar fluctuaciones semanales importantes, sobre todo en el canasto Staying Clean, su crecimiento fue de 12% en valor, creciendo dos veces más que el resto de los canastos.
Mientras que los aromatizantes comienzan a ser manejados por tenderos, pero con poca distribución y para este punto de la contingencia los desinfectantes han llegado casi a duplicar su precio regular.
«Los consumidores mexicanos se están adaptando a esta realidad. Si bien es cierto, que el COVID-19 ha golpeado de forma distinta cada país, provocando que las medidas preventivas y de contención sean diferentes, la rapidez con la que se comparte la información, ha tenido un impacto directo en productos similares a nivel global», precisó.
También compartió que, de acuerdo a las etapas del comportamiento que tiene el consumidor a nivel mundial frente al COVID-19, nuestro país entrará a la etapa 4 y 5, la preparación para la vida en cuarentena y la vida restringida.
Con ello, se prevé incrementen las compras en línea y disminuyan las visitas a las tiendas, así como el incremento en la restricción de personas dentro de una tienda y el incremento en el precio de algunas categorías.
La compañía identifica, a nivel mundial, seis etapas del comportamiento frente al Covid-19:
- Compras proactivas para la salud: el interés aumenta en los productos para el mantenimiento general de la salud y el bienestar.
- Gestión reactiva de la salud: dar prioridad a los productos esenciales para la contención del virus, la salud y la seguridad pública.
- Preparación de la despensa: almacenamiento en la despensa de alimentos y un surtido más amplio de productos para la salud.
- Preparación para la vida en cuarentena: el aumento de las compras en línea, la disminución de las visitas a las tiendas.
- Vida restringida: los viajes de compra restringidos, preocupaciones sobre el precio que va aumentando.
- Vivir una nueva normalidad: la gente vuelve a las rutinas diarias, pero opera con una renovada cautela sobre la salud.