El tamaño de la nube o «pluma» de polvo proveniente del desierto del Sahara, que comenzó a llegar el pasado martes a México es atípica, reveló el investigador del Centro de Ciencias de la Atmósfera de la UNAM, Luis Ladino.
Al ofrecer la conferencia «Tormentas de polvo provenientes del Sahara ¿cuáles son sus efectos en México?» detalló que si bien es un fenómeno que ocurre cada año, la cantidad que se observa este 2020 es una situación que no se había visto en últimos 50 años.
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Explicó que para 2017 y 2018 que se estudió esta arena que llega de África a Mérida, satura entre 300 y 500% la calidad del aire con partículas PM10 y PM2.5.
Por lo que se han mantenido monitoreando el avance desde el pasado 18 de junio, que la NASA reportó una pluma “masiva” de polvo del Sahara y que ya se prevé que se disipe para el próximo 25 de junio.
Efectos positivos
- Transporte de nutrientes océanos y suelos
- Inhibición de ciclones tropicales
- Enfriar la superficie terrestre
Efectos negativos
- Baja visibilidad
- Mala calidad del aire (enfermedades respiratorias)
- Transporte de patógenos oportunistas, microorganismos de África o Islas del Caribe
Explicó que otro efecto es la formación de nubes, y como esto altera el ciclo del agua, aunque esto podría ser un efecto que se ubique a la mitad de los negativos y positivos.
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