Los agentes de la Policía Federal que se incorporen a la Guardia Nacional deben conservar su rango, remuneración y prestaciones, de acuerdo con la determinación de la Segunda Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).
La corporación de seguridad, creada en el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, quedó oficialmente establecida tras la publicación del Acuerdo en el Diario Oficial de la Federación el 28 de junio de 2019. Sin embargo, no preveía la garantía de mantener el salario y grado a los elementos en dicha transición de la Policía Federal, Policía Militar y Policía Naval a la Guardia Nacional.
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Ante tal panorama, la SCJN atrajo el caso con base en tres tesis y la resolución de dos amparos. Así, dictaminó que al conservar las condiciones de los elementos, a través de la Ley de la Guardia Nacional, no existe violación al ”artículo tercero transitorio del decreto por el que se reforman, adicionan y derogan diversas disposiciones de la Constitución Política relativas a la Guardia Nacional”.
Por lo tanto, quienes pasan de la Policía Federal a la Guardia Nacional tienen derecho a conservar su salario y rango. Además, recibir las mismas gratificaciones, retribuciones, compensaciones o “cualquier otro concepto que percibían”.
La polémica alrededor de la institución de seguridad no cesa desde su creación. Ahora, el mandatario mexicano ha expresado públicamente que contempla una reforma para incorporarla oficialmente a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena). No obstante, originalmente surgió como una corporación civil, que conservaría ese carácter.