El frío puede volvernos un poco perezosos al vestir, ya que nuestros ánimos suelen bajar y las ganas desesperadas de mantenernos en calor cuando salimos de casa nos hacen caer en errores que atentan contra nuestro estilo, como el excesivo uso de capas sobre capas.
Un secreto que nos va a ayudar a mantenernos dignamente vestidos en invierno es que hagamos un esfuerzo e invirtamos en un buen abrigo, uno de color, línea y diseño discretos, de tal manera que podamos llevarlo en el día a día, en una salida casual y hasta en la noche.
