El vórtice de la tormenta tropical Isaac se alejó de la costa norte de Cuba antes del amanecer del domingo y ganaba fuerza en mar abierto mientras se dirigía hacia los Cayos de Florida, donde podría llegar como huracán de categoría dos más adelante en el día.
Isaac cobraba vigor renovado gracias a las aguas cálidas del estrecho de Florida, después de causar estragos en Cuba, donde pasó como tormenta tropical.
Isaac provocó el sábado el derrumbe total o parcial de unas 50 viviendas en la ciudad de Baracoa, a 900 kilómetros al este de la capital. También hubo interrupción parcial o total de los servicios eléctricos y telefónicos.
“Unos 1.093 baracoenses fueron evacuados en casas de familiares o amigos” informó el domingo el diario Juventud Rebelde.
El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos, con sede en Miami, informó que el epicentro de Isaac estaba a unos 220 km (135 millas) al este-sureste de Cayo Hueso a las 8 am del domingo, hora de la costa este. La tormenta tenía vientos máximos sostenidos de unos 100 kph (cerca de 65 mph) y se movía hacia el oeste-noroeste a 31 kph (20 mph). Horas antes, los vientos de Isaac tenían alrededor de 95 kph (60 mph).
Los meteorólogos pronosticaron que se fortalezca en las próximas 48 horas y que Isaac tendrá categoría de huracán o una fuerza cercana para cuando toque tierra en los Cayos de Florida el domingo más tarde.
El Centro dijo que la tormenta podría convertirse en huracán de categoría 2 en los próximos días, mientras se aproxima a la costa estadounidense en el Golfo de México.
En Cuba, Dariel Villares y su prima perdieron cada uno su casa debido a las penetraciones del mar en el Malecón de Baracoa. “Vino una ola alta y tumbó las dos paredes aquí, la mía y la de mi prima”, explicó Villares a reporteros de APTN. La lluvia cesó en Baracoa unas tres horas después de la llegada de la tormenta.
“Los daños preliminares atañen a 32 caballerías de diferentes cultivos, fundamentalmente coco, cacao y plátano, así como a líneas y postes de los servicios de telefonía y electricidad”, informó Eudis Romero Suárez, presidente del Consejo de Defensa Municipal en Baracoa, citado por Juventud Rebelde, el único rotativo de circulación nacional en la isla los domingos.
Entretanto, no se registraron pérdidas humanas. “Hasta ahora no ha habido ninguna perdida en el mar, ni ninguna fatalidad. Está todo bajo control”, aseguró a APTN Javier De La Cruz, rescatista de la Cruz Roja en Baracoa.
En Haití se reportó la muerte de al menos cuatro personas. Entre las víctimas se encuentran una mujer y un menor fallecieron en la comunidad de Souvenance, informó el senador Francisco Delacruz a una radio local, mientras que en Thomazeau una niña de 10 años perdió la vida al caerle un muro encima, dijo la directora de Protección Civil de Haití, Marie Alta Jean-Baptiste.
Al menos 5 mil personas fueron desalojadas por las inundaciones, agregó. Sin embargo, muchos se quedaron y pasaron apuros.
La tormenta arrancó los techos de unas 300 casas en el barrio capitalino de Cité Soleil, donde el agua alcanzó un metro (tres pies) de altura, anunció la gerente del grupo independiente estadounidense World Vision, Rachel Brumbaugh.
La organización Médicos sin Fronteras dijo que anticipaba un incremento en los casos de cólera debido a la inundación y que se prepara para recibir más pacientes. El aeropuerto internacional fue reabierto por la tarde del sábado, pero aún había una extensa inundación por todo Puerto Príncipe después de 24 horas de lluvia constante.
AP