Ser comediante requiere de 1% de talento y el resto es disciplina. Por lo menos, así lo describe Alex Marin y Kall, conocido como Esewey, quien hace comedia en un escenario y en los programas de Houston, tenemos un programa.
Son tres años que Alex lleva como comediante, pero no se trata de un improvisado: ha escrito guiones cómicos e informativos para radio y televisión; estudió Comunicación en la UNAM y producción musical en Londres.
Fue publicista durante un tiempo, abandonó ese camino tras darse cuenta que había una idea mejor por vender: Esewey para comediante. Publimetro platicó con Alex Marin y Kall, a quien también conocen como el Brigadier.
¿Qué se necesita para hacer reír?
–Trabajo. Mucha gente cree que para ser comediante sólo tienes que ser cagadito y no. Ahora que me dedico a esto me doy cuenta de que sí necesitas alguna destreza, porque requieres de un cierto porcentaje de ese talento nato, pero creo que 99% es trabajo, constancia y disciplina.
¿Cómo te preparas?
– Haciendo shows. El público es como un animal constante, tiene ciertas reacciones, responde a ciertos estímulos que tienes que ir identificando en tu material. Hay chistes que entre tú y yo van a ser graciosos, pero subo al escenario y no van a funcionar: hay que moverles redacción o matarlos, ahí es donde viene la preparación más fuerte, porque tienes que buscar lugares, que en este caso son los micrófonos abiertos o los bares, para probar material; básicamente la preparación viene de la disciplina.
Alguna vez dijiste que hasta para reír se necesita técnica, ¿tienes alguna?
– No entendí que había una técnica hasta en los madrazos, pero sí hay una técnica, una disciplina. Todo empieza observando las cosas: qué te molesta, qué te preocupa; eso convertirlo en una expresión, con el objetivo de hacer reír y eso, eventualmente, se vuelve un chiste; suena más sencillo de lo que en realidad es. Te puedo decir que me parece muy gracioso, “las escaleras de caracol son resbaladillas”; la gente no lo entiende; a mí me parece chistosísima la premisa: si un caracol quiere una escalera, es una resbaladilla, ahora, ¿cómo hago para que la gente lo entienda? Llevo semanas tratando y no cae el chiste; debes tener ese criterio de “esto no funciona” y de matarlo. Es una labor de observación, redacción y precisión, posteriormente, de ejecución.
¿Cómo te vinculaste con el stand up comedy?
– Por finales de los noventa, fui a Seattle, fui a un stand up comedy club; fue un concepto nuevo para mí y me interesó. Sofia Niño de Rivera, que era mi clienta, me dijo “estoy harta de la publicidad, me dedicaré a hacer stand up”; empecé a conocerla, a tratar gente de otros lados; muchas personas en mi entorno me fueron llevando a esto. Me fui a Londres a hacer comedia y a tomar cursos de actuación para mejorar mi ejecución, cuando regresé de Londres había un boom. Iniciamos en el Revel un open mind, con Juan Carlos Escalante iniciamos con un micrófono abierto en Florencia; eso que empezamos se hizo fértil y comenzó a jalar a más gente.
Redes sociales
En Facebook lo encuentras como www.facebook.com/esewey y en Twitter, @esewey. En YouTube, ve sus videos en www.youtube.com/user/esewey
Trayectoria
Estudió Periodismo y Comunicación Colectiva en la FES Acatlán. Ha realizado guiones para el programa El Weso.
Lo más…
• Complicado. Por lo menos en mi caso y en muchos de mis compañeros que hacemos stand up es que generamos nuestro propio material y ahí es donde se complica todo porque no es lo mismo que con tus amigos y tu familia digas algo y hagas reír a que generes un texto que, digamos al ser masivo del público, le haga la misma gracia.
• Satisfactorio. Estoy haciendo lo que quiero. Por lo menos, en mi show, nadie me dice qué decir o cómo decirlo; yo mismo lo voy midiendo con mi gente.
• La labor de un comediante. Primordialmente es entretener a la gente; montar un buen show y hacer reír.
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