La Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) es una “isla de opacidad”; su gasto de operación es el más elevado del país, con más de mil 472 millones de pesos para este año; y ha fracasado en su papel de ser un contrapeso del jefe de Gobierno de la capital, Miguel Ángel Mancera.
Éste es el diagnóstico presentado por Integralia Consultores, el cual advierte que no existen mecanismos de rendición de cuentas, para saber en qué, cómo se ejercieron los recursos disponibles.
A través de un estudio titulado Segundo Reporte Legislativo de la ALDF, la agrupación señala que adicional al pago del salario de los 66 diputados locales, que suma 68 mil 893 pesos, los grupos parlamentarios reciben 13 millones adicionales para subvenciones.
Luis Carlos Ugalde, director de Integralia, señaló al interior de la ALDF que existe gran ineficiencia en el trabajo que desarrollan sus comisiones, ya que hay funciones duplicadas, además de que no se reúnen en tiempo y forma como se los ordena la ley.
Por ejemplo, apuntó, en los grupos de Transparencia a la Gestión, de Vigilancia de la Contaduría Mayor de Hacienda y la Registral y Notarial, sólo se reunieron en tres ocasiones, entre septiembre de 2012 y abril de 2013, incumpliendo la ley que les obliga a sesionar al menos una vez al mes.
“En el caso de las comisiones especiales, aunque no están obligadas a sesionar mensualmente. Llama la atención el número reducido de reuniones; las de Estudio y Análisis de las Finanzas Públicas, Límites Territoriales, y Fomento en Inversión en Infraestructura sólo han sesionado una vez”, refirió Ugalde.
Cifras clave:
• Mil 472 millones de pesos suma el presupuesto de la ALDF para este año, cifra que resulta 306% superior al gasto promedio de los Congresos estatales y 16.7 veces mayor a lo ejercido por el Legislativo de Colima, que es el más austero.
• 48% del dinero que recibió la Asamblea en los últimos cuatro años, equivalente a tres mil 532.7 millones se destinó a los salarios, prestaciones y honorarios de los diputados y asesores; otra cantidad igual cubrió la nómina del personal base y de confianza, además de los materiales y servicios para la operación de oficinas.
• 68 mil 893
pesos suma la dieta o ingreso base mensual de cada uno de los 66 legisladores, cantidad que duplica los 33 mil 536 que reciben sus correligionarios de Tlaxcala.
Reina la opacidad
El reporte presentado este lunes evidencia que:
• Los grupos parlamentarios en la ALDF se manejan con opacidad en el uso de prerrogativas, las cuales sumaron 592 millones de pesos entre 2009 a 2012, sin que ningún grupo reporte en qué gastó el dinero.
• Reportó que sólo cinco de las 56 comisiones existentes publicaron sus informes del primer período ordinario de sesiones en la Gaceta Parlamentaria.
• Mientras que para el segundo período sólo lo hizo la Comisión de Atención a Grupos Vulnerables.
• Por si fuera poco, los encargados de comprobar y autorizar los gastos son los coordinadores parlamentarios.