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Mientras que la mayoría de la celebridades invierte miles de dólares por esconder o desvanecer sus defectos físicos, la extrovertida cantante Miley Cyrus insiste en hacer todo lo contrario.
Pareciera que a la intérprete de “Adore” le importa poco cómo luce antes sus seguidores, ya que invierte demasiado tiempo, dinero y esfuerzo en resaltar sus defectos.
En varias ocasiones hemos visto a la ex estrella de Disney lucir sin cejas, vestir diminutos atuendos que exhiben su extrema delgadez; casi todos conocemos hasta sus amígdalas por esa extraña fijación por sacar la lengua y, como en esta ocasión, hasta llegar a portar una pronunciada prótesis dental.
El concepto de belleza convencial para Miley no es un problema, mucho menos una presión, sino todo lo contrario, siempre intenta lucir como ella es, sin tapujos y complejos. Aunque aún no nos queda claro si ya rayó en la exageración.
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