Valarie Watts perdió a su hijo Noah una semana antes de que éste naciera. A pesar de haber vivido un saludable embarazo durante nueve meses, el cordón umbilical se fracturó unos días antes del parto. El pequeño falleció en julio de 2013. Todas las cosas que Watts había preparado para recibir a su primogénito quedaron sin ser utilizadas.
Recientemente, en una venta de garage, Gerald Kumpula descubrió la cuna del pequeño y pidió comprarla con la intención de construir un banco. Watts, dudosa, aceptó vender la cuna, no sin antes confesar a la esposa de Kumpula que su hijo había muerto antes de poder utilizarla.
Al marcharse, Gerald y su cónyuge decidieron que debían devolver la cama a Watts, no sin antes hacerle unas modificaciones. Para honrar a Noah, Kumpula creó un hermoso banco y lo regaló a Valarie.
En entrevista con Fox News, Watts dijo: “Comencé a llorar de inmediato […] es sorprendente […] hay gente buena ahí afuera”.
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