Aproximadamente 40 mil seguidores llegaron al estadio Azteca, con capacidad para más de 95 mil espectadores, a participar del homenaje póstumo para Roberto Gómez Bolaños, Chespirito, que organizó Televisa. Fanáticos mexicanos y también provenientes de varios países de América Latina llenaron la bandeja inferior del recinto deportivo.
Los boletos comenzaron a repartirse a las 10:00 horas de México. Mientras, cerca de las 11:30 de la mañana, salió el cuerpo de Chespirito de las instalaciones de Televisa rumbo al Azteca. un recorrido de 14.6 kilómetros a través de la zona sur de la Ciudad de México, que una carroza roja, adornada con una estatua de “El Chapulín Colordo” y otra de “El Chavo del 8”, recorrió en una hora y 50 minutos.
Las horas de espera mermaron en el ánimo de algunos asistentes. ” Llegamos desde temprano porque creemos que Chespirito fue un ícono por todas las generaciones que ha divertido. Hizo falta más gente, faltó mucha organización porque fueron muchas horas y todo empezó tarde”, comentaron visitantes de una familia originaria de Cuernavaca, Morelos .
Eso sí, cuando a las 13:30 horas el cuerpo de Chespirito arribó a la cancha del estadio Azteca, la multitud lo recibió con vítores y gritos como “Chespirito no te vas” y “Chavo, chavo”. Una vez instalado en la mitad del campo de juego, los asistentes dejaron una flor en la cancha y le presentaron respetos al comediante.
A las 14:40 comenzó la celebración religiosa, tras la cual apareció un coro de niños y un grupo de mariachis. Finalmente, el cuerpo de Chespirito fue trasladado alrededor de la cancha del Azteca. La vuelta olímpica final del comediante.
En la galería verán imágenes de la larga jornada de más de seis horas que duró el homenaje a Chespirito. Para leer la información desde un smartphone o tablet, seleccionen “ampliar galería” y después “mostrar texto”.