Miren como esta feliz nuestra eterna flaquita ♥♥♥ pic.twitter.com/iVIUFGwYIE
— Anymaniacos Brasil (@AnymaniacosBR_) febrero 15, 2016
Junto con mi esposa @Anahi de Velasco recibimos al Papa Francisco y le deseamos mucho éxito en su gira por #Chiapas. pic.twitter.com/pWeuUE184v
— Manuel Velasco (@VelascoM_) febrero 15, 2016
El 15 de febrero de 2016, en pleno encuentro multitudinario en el estadio Víctor Manuel Reyna, la capital chiapaneca vivía una jornada intensa con temperaturas superiores a los 35 grados. En medio del entusiasmo colectivo por recibir al Papa Francisco, la escena se llenó de contrastes. Por un lado, el mensaje de humildad y fraternidad que caracterizó todo el pontificado del líder católico. Por otro, los gestos de ostentación visibles entre el público.
Entre los asistentes no pasaron desapercibidos los bolsos, carteras, pañoletas y fundas para celular de la exclusiva marca francesa Louis Vuitton. El clásico monograma, los modelos en lona Damier Azur, los acabados en piel de vaca natural y otros elementos distintivos de la firma de lujo brillaron en ciertas zonas del estadio, marcando una evidente diferencia con el espíritu de austeridad promovido por el Papa argentino.

El dato económico tampoco pasó inadvertido. En aquel año, los precios de esos artículos oscilaban entre los 15 y los 21 mil pesos para bolsos y carteras, mientras que las pañoletas rondaban los cinco mil pesos. Incluso las fundas para celulares superaban los cuatro mil 800 pesos, según los catálogos oficiales de la marca en línea.

Una postal inesperada: entre el Evangelio y el diseño francés
La contradicción visual entre el discurso del Papa y la imagen de ciertos asistentes generó murmullos, comentarios y reacciones. El mismo evento había sido escenario de momentos emotivos y oficiales, como la bienvenida del entonces gobernador Manuel Velasco y su esposa, la cantante Anahí, quienes recibieron a Francisco con muestras públicas de entusiasmo.
Fue un día marcado por la emoción religiosa y por un simbolismo profundo. Pero también por detalles que escaparon a la narrativa oficial. Solo Publimetro documentó en exclusiva esta escena en la que los mensajes de sencillez y justicia social convivieron, sin quererlo, con accesorios de alto valor económico.