Donald Trump dijo hoy que podría instalar uno de sus hoteles en Cuba “en el momento indicado”, sólo cuando el gobierno de la isla desista por escrito de buscar pagos millonarios compensatorios de Estados Unidos por el embargo comercial.
“Lo haría, lo haría, en el momento indicado, cuando nos lo permitan hacer. Ahora no”, declaró Trump durante una entrevista con la cadena CNN, aunque expresó dudas sobre el éxito de una empresa de ese tipo a pesar de aceptar que Cuba “tiene cierto potencial”.
Trump, quien estuvo en la capital para reunirse con algunos legisladores republicanos en busca de apoyo para su campaña y pronunciar un discurso ante un influyente grupo judío de cabildeo, aseguró empero que él continuaría normalizando relaciones con Cuba.
“Probablemente (lo haré), pero quiero mejores acuerdos que los que estamos haciendo”, aludiendo a los acuerdos alcanzados entre Cuba y Estados Unidos en el último año para facilitar los intercambios económicos, financieros y de personas entre ambas naciones.
El millonario de bienes raíces y precandidato presidencial dijo tener conocimiento de que Cuba planea presentar una demanda contra Estados Unidos, buscando una reparación por los daños provocados a la economía cubana por el embargo comercial, vigente desde 1962.
“Naturalmente, antes de que yo haga algo para la normalización (de relaciones), los haría firmar algo diciendo que no van a presentar esa demanda”, insistió.
Trump repitió su crítica por la decisión del presidente cubano Raúl Castro de no acudir al aeropuerto José Martí para recibir al presidente Barack Obama a su arribo la tarde del domingo para iniciar su visita de dos días a la isla.
“Resulta bastante irrespetuoso cuando el presidente de Estados Unidos aterrizó y Castro no estaba ahí para recibirlo”, indicó.
Trump hizo notar que el mandatario cubano acudió a recibir a la terminal aérea al Papa Francisco en su pasada visita a la isla, así como a líderes de países “más pequeños y francamente países menos importantes”.