Respalda SHCP a Pemex como Empresa Productiva del Estado https://t.co/tm4WLrdbWn
— Petróleos Mexicanos (@Pemex) 14 de abril de 2016
Comunicado de Prensa: Se anuncian medidas de apoyo del Gobierno Federal a @Pemex https://t.co/oMUtou9CP1
— SHCP México (@SHCP_mx) 13 de abril de 2016
La @SHCP_mx anuncia el destino del remanente de operación 2015 de @Banxico https://t.co/LVwTlUyjbG
— Luis Videgaray Caso (@LVidegaray) 11 de abril de 2016
El «apoyo» financiero que el Gobierno dará a Pemex, por 123 mil 500 millones de pesos, no soluciona ni atiende las necesidades de desarrollo, infraestructura, productividad y aprovechamiento de hidrocarburos que la empresa debe cubrir para convertirse en un polo de desarrollo para el país.
El plan, anunciado el miércoles pasado por la Secretaría de Hacienda, da liquidez a la paraestatal para pagar deudas, proveedores, pensiones y jubilaciones, pero carece de una estrategia de inversiones, aumento de reservas, producción de combustibles de calidad y crecimiento.
Éstas son las conclusiones de los analistas de la Universidad Iberoamericana, el Tecnológico de Monterrey y la consultora KPMG México, quienes coincidieron en señalar que el otorgamiento de 123 mil 500 millones de pesos a Pemex es «positivo», pero insuficiente para reestructurar y garantizar la viabilidad de la petrolera.
Parche financiero
Abraham Vergara Contreras, miembro del Departamento de Estudios Empresariales de la Universidad Iberoamericana, señaló que la inyección de recursos que recibirá Pemex es «un parche» que no garantiza su viabilidad financiera ni ofrece alternativas de desarrollo de mediano plazo.
«La transferencia de recursos anunciada por la Secretaría de Hacienda otorga a la empresa 47 mil millones de pesos al pago de pensiones y jubilaciones; 26 mil 500 millones para liquidar deudas con proveedores y 50 mil millones más para mejorar su liquidez durante este año, pero eso no implica que tenga solvencia financiera y productiva de mediano plazo.
«Si no se aplican mecanismos eficientes de control de deudas, administración de recursos e inversiones productivas, el Gobierno seguirá parchando las finanzas de Petróleos Mexicanos de forma recurrente, porque lo único que aplica son medidas muy cortoplacistas», dijo.
Y todo este tema, apuntó el especialista, es muy importante para los mexicanos en general, porque Pemex sigue siendo una fuente importante de recursos para los ingresos del Gobierno, a través de los cuales se financian y proveen servicios de salud, educación, infraestructura y desarrollo social, entre otros.
Urgente, restructura de Pemex
Leticia Armenta Fraire, directora del Centro de Análisis Económico del Tecnológico de Monterrey, señaló que los recursos que recibirá Pemex le ayudarán a mejorar su posición financiera durante este año, pero lo que en realidad necesita es cambio estructural, que promueva nuevos proyectos de exploración y producción de hidrocarburos.
Y eso, apuntó, no se da con las medidas anunciadas el miércoles pasado por la Secretaría de Hacienda, sino a través del diseño de una estrategia de crecimiento y desarrollo de la empresa de mediano y largo plazos, la cual debe pasar por atraer nuevas inversiones.
«Ningún rescate fiscal o inyección de recursos va a sustituir la nueva estrategia de negocios, de producción de hidrocarburos, de refinación y de salud financiera que necesita Petróleos Mexicanos para convertirse en un polo de desarrollo real», dijo.
Redefinición de objetivos
Rubén Cruz, socio líder de Energía y Recursos Naturales de la consultoría KPMG México, explicó que, si bien la transferencia de recursos y el cambio fiscal de Pemex son positivos, porque mejoran su liquidez, es necesario trazar las medidas para mejorar la producción, invertir y garantizar el funcionamiento de la petrolera.
Sin embargo, refirió, es necesario que los integrantes del Consejo de Administración de la paraestatal determinen cuáles son los objetivos, las políticas y proyectos específicos de desarrollo en cada área productiva y los plazos para ofrecer resultados concretos.
Indicó que a través de las modicifaciones al regimen fiscal de Pemex y las medidas anunadas por la Secretarìa de Hacienda se están sentando las bases para el desarrollo de la empresa y el aprovechamiento de los cambios previstos en la reforma petrolera, aunque los resultados se verán en un periodo de tres a cinco años.
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