Los mexicanos que buscan trabajo son discriminados por feos, reveló el sitio especializado Trabajando.com México.
A través de una encuesta titulada Lindos y Feos reveló que 46% de la población han sido relegado –al buscar empleo– por sus aspecto físico.
Señaló que dicho tipo de discriminación se observa en personas con obesidad, discapacidades, tatuajes y con enfermedades o defectos físicos.
Sin olvidar, apuntó, que también se discrimina por color de piel, las preferencias sexuales, la edad y las formas de vestir, hablar o gesticular de quienes solicitan un empleo.
«De acuerdo al Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación, la apariencia física e la sexta causal de discriminación laboral en México», Trabajando.com.
Los mexicanos «lindos» son favorecidos
En contraste, la encuesta de reveló que 75% de los mexicanos considera que las personas «bonitas», «lindas» y jóvenes encuentran trabajo con mayor facilidad.
Mientras que el 25% restante asegura que ser contratado no tiene nada que ver con su apariencia, sino con sus competencias, experiencia y habilidades profesionales o laborales.
Señaló que, ante la pregunta que «¿por qué a los feos les cuesta más trabajo encontrar empleo?», 40% respondió que las empresas valoran más la imagen que las capacidades de los candidatos.
Destacó que 34% de los encuestados manifestó que existen algunos trabajos donde la apariencia física es importante.
En tanto que otro 14% respondió que la discriminación laboral por el aspecto físico ocurre porque los reclutadores son superficiales; y 12% señaló que ello ocurre por la imagen de la empresa.
Pedir fotografías, ¿acto de discriminación?
Margarita Chico, directora general de Trabajando.com México, señaló que «el aspecto físico no debería ser, por ningún motivo, una fuente de discriminación.
Incluso, señaló que –en varios países de Europa– casi ninguna empresa u organismo solicita fotos de los candidatos a un puesto de trabajo.
«Ello, porque se asume que pedir fotografías un acto discriminatorio en sí mismo, ya sea por la raza, edad, origen étnico, color de pelo, estilo de maquillaje o cualquier otros aspecto relacionado con la apariencia de los solicitantes de empleo.
Hay que entender, apuntó la especialista, que ninguna característica física podría sustituir los conocimientos o la experiencia del candidato a un cargo.
«Pero, sin duda, una buena presentación física, limpia y acorde al lugar donde se postula, podría contribuir al éxito en la búsqueda de empleo», concluyó.
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