Este lunes, en el marco de los 48 años del Sistema de Transporte Colectivo (STC), se anunció que en 2019 el Metro de la Ciudad de México se moverá a partir de la basura.
La construcción de la Planta de Termovalorización -que quemará la basura para generar energía eléctrica- tardará 18 meses en construirse y operar.
En la presentación de la Planta, que se llamará El Sarape, el jefe de gobierno, Miguel Ángel Mancera, refirió que la energía que se genere también servirá para el Nuevo Aeropuerto de la Ciudad.
Lo anterior debido a que la planta El Sarape estará en el Bordo Poniente, muy cerca de los terrenos donde se construye el Nuevo Aeropuerto.
El director del Metro, Jorge Gaviño, detalló que el Sistema de Transporte Colectivo es el primer consumidor de energía eléctrica en la Zona Metropolitana del Valle de México y el quinto a nivel nacional.
Mediante la Planta de Termovalorización podremos mover al @MetroCDMX con energía obtenida apartir de la basura. pic.twitter.com/NC1GVSmgoH
— Jorge Gaviño (@jorgegavino) September 4, 2017
Mancera Espinosa abundó que con El Sarape se van a generar 965 mil mega watts/hora para el Metro al año, que equivale al consumo eléctrico de 120 mil viviendas.
De esta manera el Metro dejará de pagar unos mil 800 millones de pesos al año a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) que podrán ser utilizados para la compra de refacciones.
El Sarape tendrá un costo de 12 mil millones de pesos aportados por la iniciativa privada y a pagarse en 33 años.
Tendrá capacidad de aprovechar el valor calorífico de cuatro mil 500 toneladas de basura de las 13 mil que se generan cada día en la Ciudad de México.
Serla la planta más grande y con mayor capacidad del mundo, y la primera en su tipo en toda América Latina.
Con esta planta más de de biodigestión, la Ciudad de México será capaz de aprovechar 11 mil 400 toneladas de basura y reducir así drásticamente la cantidad de residuos que manda a rellenos sanitarios.
De hecho, actualmente el Gobierno capitalino gasta dos mil millones de pesos al año para el traslado y disposición en rellenos sanitarios del Estado de México y Morelos de ocho mil 500 toneladas de basura.
