Más de 100 activistas por los derechos de los animales protestaron el jueves en Pamplona con el simulacro de un tradicional encierro en medio de columnas de humo rojo, en la víspera del inicio de la popular fiesta de San Fermín en la ciudad del norte de España.
Los encierros, en los que seis toros recorren las estrechas y empedradas piedras del centro de la ciudad rodeados de corredores, son el acto central de esta fiesta centenaria, que se celebra entre el viernes y el 14 de julio.
Activistas de la ONG internacional Personas por el Trato Ético de los Animales (PETA por sus siglas en ingles) y de la española AnimaNaturalis, vestidos de negro y con portando máscaras de cartón que simulaban la cabeza de un astado, mostraron carteles con el lema «Stop corridas de toros».
Se espera que alrededor de un millón de personas, cinco veces más que su población, visiten Pamplona durante San Fermín. Los seis toros que participan en la carrera matinal son lidiados por la tarde en la plaza.
