Andrés Manuel López Obrador (AMLO) busca un eventual aumento en la edad de retiro de los trabajadores formales del país; a través de la propuesta de entregar una pensión universal a los adultos mayores a partir de 68 años, y no de 65, como en los programas actuales.
Con tal estrategia –anunciada este lunes por el virtual secretario de Hacienda del próximo gobierno, Carlos Urzúa–, AMLO abre el debate para que la mayoría de Morena en el Congreso apruebe tres años más a la edad oficial en que los mexicanos deben jubilarse, indicaron especialistas.
Aunque reconocieron que, en el corto plazo, la pensión universal para adultos mayores de 68 –que entregaría la administración lopezobradorista a partir de diciembre próximo– promovería bancarización; elevaría el consumo interno y el crecimiento de la economía.
Raymundo Tenorio Aguilar, director de la carrera de Economía y Negocios del Tec de Monterrey, campus Santa Fe, explicó que el anuncio de Carlos Urzúa representa un compromiso y una decisión administrativa con tres implicaciones concretas:
- Primera: quienes tengan 68 años y que no reciben ningún tipo de pensión, recibirán –a partir de diciembre— alrededor de mil 200 pesos mensuales; a través del programa de subsidios de adultos mayores del gobierno de AMLO. Esta cifra que representa el doble del monto actual.
- Segunda: quien ya recibe pensión a través del programa –vigente– de 65 años y más, seguirá con el mismo apoyo de 580 pesos al mes que ya obtienen; y, hasta que cumplan 68, tendrán el nuevo monto de mil 200 pesos.
- Tercera: si el secretario de Hacienda del nuevo gobierno ya hizo públicas tales desiciones, existe una posibilidad real de que la edad oficial de retiro de los trabajadores mexicanos, que trabajan para el IMSS e ISSSTE, también se incremente de 65 a 68 años; aprovechando la mayoría de Morena en el Congreso.
Crisis de pensiones a detalle
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PIB a 3% con pensiones de AMLO
Abraham Vergara Contreras, coordinador de licenciatura en Contaduría y Gestión Empresarial de la IBERO, explicó que el programa de pensiones para adultos mayores de AMLO tiene una vertiente positiva: elevar la tasa de crecimiento del país hasta 3% entre el primero y segundo año del sexenio.
Ello, apuntó, siempre y cuando se aproveche dicha entrega de recursos para incentivar el consumo interno; y la recaudación del IVA en productos de primera necesidad, incluidos los alimentos y medicinas, que hoy no pagan impuestos.
Además, apuntó de cumplir y concretar con los proyectos de infraestructura, la austeridad en el presupuesto, las becas para los jóvenes y los programas de desarrollo prometidos por López Obrador. “Si esto pasa, el PIB subiría de 2% a 3%”, dijo.
“La decisión de entregar las pensiones para adultos mayores hasta cumplir 68 años, demuestra que los ingresos disponibles no alcanzan para cumplir con las promesas de AMLO de entregar un apoyo universal al doble.
“Y si se suma una reforma estructural de pensiones, con la misma edad, condiciones y montos para todos los trabajadores –IMSS, ISSSTE, CFE, universidades y Pemex–; AMLO combatiría la impopularidad o descontento que traería subir la edad oficial de retiro o jubilación por vejez a 68 años.
ANÁLISIS: Positivo subir edad de jubilación
Enrique Díaz Infante Chapa, director del Programa de Seguridad Social del Centro de Estudios Espinosa Yglesias, señaló que es positivo aumentar la edad de retiro de los trabajadores mexicanos a 68 años.
¿Por qué es necesario subir la edad de jubilación?
– Si el gobierno de AMLO aprovecha su mayoría del Congreso para cambiar la edad de jubilación a 68 años, liberaría una buena parte de las presiones que ejercen las pensiones sobre las finanzas públicas.
Porque de esta manera aumenta el periodo de ahorro y aportaciones que los trabajadores realizan en su cuenta individual de Afores o esquema de pensiones que corresponda; además de que disminuyen las partidas presupuestarias para tal efecto, que hoy salen de los impuestos.
¿Cuál es impacto real del nuevo esquema de apoyo para adultos mayores de AMLO?
– Entregar una pensión universal a los adultos mayores sí mejorara e impulsa el consumo; sí abre la posibilidad de recaudar en algunos productos, y sí extiende los servicios financieros o bancarización entre la población.
Pero si no es acompañada por una reforma estructural integral a todos los sistemas de pensiones, que incluya las Afores y a las empresas paraestatales –como Pemex o CFE–, los beneficios y esfuerzos serían insostenibles e insuficientes a largo plazo.
