Ahorrar un ‘sueño guajiro’ para más de mitad de la población; cuyo ingreso y malos hábitos de gasto les impiden administrar o reservar una parte de sus quincenas para dicho objetivo.
La última Encuesta Nacional de Inclusión Financiera (ENIF) reveló que 56% de los mexicanos no ahorra ni un solo peso; y del 44% restante –que asegura cumplir con este hábito– la mitad guarda su dinero bajo el colchón, alcancías o métodos informales.
Sandra Huerta Martínez, coach en finanzas, explicó que la falta de ahorro se ha convertido en una característica que define la cultura financiera de los mexicanos; debido al desinterés, los malos hábitos de consumo y la creencia falsa de que el dinero nunca alcanza.
Con motivo del Día Mundial del Ahorro, a celebrarse este 31 de octubre, refirió que aún cuando cuando las cifras oficiales indican que hasta cuatro de cada 10 personas ahorran, sólo la mitad lo hace a través de una cuenta bancaria, Afore o fondo formal.
Mientras que otro tanto prefiere guardar su dinero en alcancías, entre la ropa o cajones de clóset o bajo el colchón; lo que implica un riesgo elevado de robo o pérdida del poder de compra ante el constante aumento de la inflación.
“El panorama es contundente: la mayoría de los mexicanos llegará o celebrará el Día Mundial del Ahorro sin un peso guardado; o alguna parte de su quincena disponibles para hacer frente a imprevistos como enfermedades, accidentes, desempleo o gastos recurrentes.
“Y aunque las razones son muy diversas: desde no me alcanza, hasta es muy difícil ahorrar; lo cierto es que la falta de previsión y la mentalidad de que ‘Dios proveerá’ cuando necesite; es un lastre cultural entre los mexicanos”, apuntó la especialista.
• Cómo ahorran los mexicanos
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Tips para ahorrar
La Condusef y los especialistas en finanzas personales te recomiendan:
Toma en cuenta que el ahorro no es el dinero que te sobra; sino un monto que debes destinar en tu presupuesto. Algunos asesores recomiendan reservar entre 10% y 15% del ingreso; pero no hay montos mínimos ni máximos obligatorios. La cantidad depende de ti y tu esfuerzo.
Haz un presupuesto mensual. Así sabrás cuánto ganas, cuánto gastas y cuánto puedes ahorrar. Recorta lo innecesario y procura reducir tu gasto en 15% o 20%.
Destina o deposita el monto que resulte de esta última operación en una cuenta bancaria, caja debidamente registrada o en un fondo de inversión. Lo ideal es que obtengas más de 4% de rendimiento neto; o una tasa de ganancias superior a la inflación.
Establece metas de ahorro: divídelas en de corto plazo (pago de tarjetas de crédito o créditos personales); mediano (juntar dinero para la inscripción de tus hijos a la escuela, compra de útiles o la contratación de un paquete de viaje); y de largo plazo (ahorro para tu retiro laboral o Afore, adquisición de un casa o departamento).
Antes de confiar tu dinero a alguna institución, verifica que esté debidamente autorizada y regulada por las autoridades. Investiga en la Condusef cuál institución te da una mayor tasa de interés, mejor servicio y te cobra menos comisiones.
Revisa, ordena y guarda los documentos que amparan todas tus cuentas de ahorro. Designa beneficiarios de tus fondos; ellos recibirán el dinero si tú llegaras a faltar y no olvides informarles.
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