El Gobierno de la Ciudad de México contará con un Laboratorio Anticorrupción con el que se podrán medir y diseñar políticas públicas para atacar la corrupción en diversas áreas y trámites.
Este laboratorio contará con la participación del Colegio de México (Colmex), Transparencia Mexicana, el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) y también Poverty Action Lab (J-PAL), y se encargará, entre otras cosas, de medir el mercado ilegal de emplacamiento de vehículos que existe para evadir el pago de tenencia en la Ciudad de México.
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Al respecto, José Merino, titular de la Agencia Digital de Innovación Pública, explicó que el fenómeno de evadir la tenencia no es nuevo, pues algunos automovilistas van a otros estados a emplacar sus unidades de lujo para evitar este pago en la ciudad. Incluso, también algunas agencias ofrecen gestorías para agilizar este trámite, situación que afecta financieramente a la ciudad.
“Entonces, el primer objetivo de este proyecto es poder proponer una metodología para medir el nivel de penetración de este fenómeno en la ciudad; estimar los costos fiscales que esto implica, y a partir de ello, proponer medidas (para atacarlo) que seguramente pasarán por un esquema de colaboración con las entidades vecinas, pero se tiene que empezar necesariamente por medir el fenómeno”, explicó.
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Cabe recordar que en la Ciudad de México los automovilistas que tienen unidades con un valor superior a los 250 mil pesos deben de pagar tenencia, en Morelos no existe este impuesto y además en el Estado de México pagan los autos que cuestan arriba de 400 mil pesos.
Otros proyectos del Laboratorio
El Laboratorio Anticorrupción también se encargará de evaluar el impacto de la Ventanilla Única de Construcción, pues los trámites asociados a la construcción de edificaciones en la CDMX han estado asociados a actos de corrupción.
Además, se trabajará en identificar los riesgos de corrupción en contrataciones públicas, pues actualmente no existe un sistema que permita identificar los riesgos de corrupción durante los procesos de contratación pública.
En este sentido, la la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, indicó que la corrupción en los altos puestos de gobierno ya se acabó, pero -dijo- hay muchos otros trámites que no dependen del funcionario de alto nivel y que deben vigilarse.
“La Agencia Digital de Innovación Pública tiene la posibilidad de que, en contacto con organizaciones y la academia, se pueda analizar la mejora en la ciudad en todos estos temas, tanto en la corrupción en la diferencia entre antes y después, y en la parte de abajo en donde a veces no tenemos muchos controles”, expuso.
