A través de un comunicado, la Coparmex Ciudad de México hace un llamado a Claudia Sheinbaum, jefa de Gobierno, para «generar acciones vinculadas con la disminución de los delitos, como podrían ser la aplicación irrestricta de la ley, la capacitación de los cuerpos de policía y agentes del Ministerio Público, la utilización de inteligencia y herramientas y material de innovación, además de estímulos a los policías».
Jesús Padilla Zenteno, presidente del Centro Empresarial, destacó que “no sólo la percepción de los ciudadanos propicia la preocupación, sino las propias cifras de los aparatos de seguridad”, como lo ha manifestado en días pasados el secretario de Seguridad Ciudadana, Jesús Orta, quien aceptó ante los diputados de la Comisión correspondiente del Congreso local, que las cosas están peor que en noviembre.
«La inseguridad es una de las preocupaciones más graves para la ciudadanía. La violencia y el crimen han llegado a niveles inaceptables. Es necesario atacar y detener esta problemática» – Jesús Padilla Zenteno.
«Desde Coparmex Ciudad de México hemos hecho, en todo momento, un llamado a las autoridades con el fin de que impulsen planes de seguridad, líneas de acción; enfoques sistémicos que incluyan a policías, jueces y fiscales, con metas de corto, mediano y largo plazo; acciones contundentes enfocadas a reducir efectivamente las tasas de robo y la inseguridad que hoy nos afectan», añadió.
Además, urgió a frenar la incidencia de los delitos, porque se afecta el crecimiento y las inversiones, y porque se afecta, sobre todo, la tranquilidad de los hogares y las familias.
Aplicación de la ley será un inhibidor: Coparmex
Para la Coparmex, «preocupa la incidencia en la Ciudad de México de algunos delitos que reporta el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, como los relacionados con la libertad y seguridad sexual con un crecimiento de casi el 50 por ciento a partir de diciembre; el robo en transporte público colectivo con un crecimiento del 44 por ciento; el robo a transeúnte en vía pública (63%); el robo a negocios (20%) y la extorsión (164%)».
No sólo en los datos que, sino también en la percepción ciudadana.
Padilla Zenteno hizo entonces la mención de que “la aplicación irrestricta de la ley será un inhibidor para aquellos que están acostumbrados a vivir en la impunidad”.
«Un tema fundamental es la capacitación de los cuerpos policiacos tanto de la Secretaría de Seguridad Ciudadana como de la Procuraduría General de Justicia, ambas de la Ciudad de México, porque en el nuevo Sistema Penal Adversarial o Acusatorio, el rigor en el levantamiento de pruebas, su traslado, exposición durante el caso y demás etapas, deben cumplir con el debido proceso y con ello, evitar la puerta giratoria que se viene dando desde junio de 2016 cuando este sistema se puso en marcha», añadió.
En el mismo caso están los agentes del Ministerio Público, para evitar que los juzgadores del Poder Judicial antepongan como excusa para sus sentencias que se realizó mal el proceso de recopilación de pruebas, sujeción a proceso del inculpado o cualquiera otra acción que ponga a los delincuentes en la calle, sin pagar sus crímenes.
Inteligencia y seguridad, además de estímulos a policías
Para Jesús Padilla Zenteno otro aspecto importante es la utilización de los aparatos de inteligencia que van vinculados con la innovación, como son las cámaras y todos los instrumentos que permitan obtener pruebas y dar con los violadores de la ley, porque a veces pareciera que es muy complejo, cuando un par de cámaras bien colocadas o apostadas en lugares estratégicos pueden dar con los responsables de los crímenes.
Asimismo, destacó que es importante generar estímulos para los policías, de tal forma que ellos también quieran mantener una forma honesta de vivir.
Padilla Zenteno argumentó, además, que ya es el tiempo en que las autoridades comiencen a dar los frutos que los ciudadanos deseamos y, si existen elementos de prueba en contra de los encargados de la administración anterior, ya se tomen medidas congruentes con el ejercicio de gobierno y se abran las carpetas de investigación necesarias contra quien haya permitido que la delincuencia creciera.
“Ya no se vale culpar a los de antes; y si hay pruebas, que se actúe en consecuencia; si se hace, será también un dique para los que están hoy (…) porque la seguridad, es un bien que todo gobierno debe procurar como tarea irrenunciable”, finalizó Padilla Zenteno.