Elementos de Gendarmería y Fuerzas Federales de la Policía Federal se manifestaron en el las instalaciones de la sede de la corporación en Iztapalapa, en protesta por su incorporación a la Guardia Nacional.
Los elementos se niegan a asistir a las evaluaciones para incorporarse a este cuerpo de seguridad, por lo que bloquearon la avenida principal y no permitieron la entrada ni salida de personal a la base.
Pese a que la protesta comenzó de manera pacífica, hubo momentos de tensión y agresiones en contra de la coordinadora operativa de la Guardia Nacional, Patricia Rosalinda Trujillo Mariel, cuando llegó a la sede de la corporación.
Los policías le gritaron «¡traidora!» y hubo empujones para impedir su acceso. Posteriormente, la funcionaria ofreció a los manifestantes diálogo con el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Alfonso Durazo.
Los policías federales se han rehusado a subirse a los camiones para ser enviados a otras entidades para incorporarse a las tareas de la Guardia Nacional, que inició operaciones formalmente el 30 de junio pasado.
Los miembros de la PF también bloquearon la carretera México-Pachuca, en protesta por las condiciones de su incorporación a este cuerpo de seguridad.
El bloqueo se encuentra en ambos sentidos a la altura del kilómetro 11, cerca de la base de la corporación ubicada en San Juanico.
Con tarimas y piedras bloquearon la circulación y sólo permitieron el paso de ambulancias y vehículos de emergencia.
Pliego petitorio
Los miembros de la corporación denunciaron la falta de certeza jurídica de sus derechos laborales al incorporarse a la Guardia Nacional y aseguraron que mientras elementos de la Marina y el Ejército tiene aseguradas sus prestaciones, grados y todo lo que obtengan mientras están en el nuevo cuerpo de seguridad, para la PF no está garantizado.
Por ello, pidieron respeto a la dignidad de los miembros de la PF, a la antigüedad laboral, a las prestaciones laborales, devolución de la operatividad de nueve mil 800 pesos cada 25 días laborados, no ser evaluados por personal militar y no pertenecer a la Sedena.
No vivir en los cuarteles militares, tener un sueldo quincenal de 15 mil pesos libres de impuestos a partir de la segunda semana de julio, desaparecer el sueldo base de dos mil 300 pesos y aumentarlo a 15 mil pesos, desaparecer el polígrafo, tener los horarios establecidos conforme a la ley federal del trabajo
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Piden la renuncia de altos mandos pues aseguran que están inmiscuidos en corrupción y crimen organizado, contar con una oficina de derechos humanos dentro del centro de mando Coctel en Iztapalapa, establecer un sindicato para la Policía Federal-Guardia Nacional, tener uniformes nuevos dos veces al año.
Así como no ser evaluados y pasar de forma automática a las filas de la Guardia Nacional. Esto, luego de que el presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que los policías que no estén en condiciones físicas no podrán formar parte del cuerpo de seguridad.