Tailandia sufrirá una aguda escasez de agua a partir de marzo cuando comience la temperada seca debido a que ha caído poca lluvia en todo el año, advirtieron este lunes autoridades.
Los niveles de retención de agua de las represas en el río Mekong también están contribuyendo a los bajos niveles de ese cuerpo fluvial, lo que afecta la ecología de la región.
Somkiat Prajumwong, director de la Agencia de Recursos Nacionales de Agua de Tailandia, manifestó que los niveles del río caerán a mínimos históricos.
La entidad advirtió a la población aledaña al río que vaya anticipando riberas secas y que tome precauciones ante posible escasez de agua en marzo y abril, cuando suben las temperaturas en Tailandia.
Las pruebas en la nueva represa Jinghong, entre el 1 y el 3 de enero, probablemente harán caer el nivel del Mekong en un metro en ocho provincias del norte y del noreste del país, estimó la agencia.
Las autoridades impusieron restricciones al uso de agua en algunas represas tailandesas a partir de fines de diciembre, reportó el diario Bangkok Post. Añadió que el director del Departamento de Irrigación, Thongplew Kongjun, anunció que el agua de las represas Ubol Ratana y Chulabhorn están siendo reservadas para consumo personal y conservación ambiental y no para irrigar cosechas.
La Comisión del Río Mekong vaticinó severas sequías en Tailandia y Camboya hasta enero por lo menos. Esa instancia regional, a la que también pertenecen Laos y Vietnam, atribuyeron el fenómeno a la falta de lluvias, a un período abreviado de lluvias monzónicas, temperaturas excepcionalmente altas y la evaporación causada por El Niño, un fenómeno climático que hace subir las temperaturas en el océano Pacífico todos los años.
En una monografía publicada por la comisión en su conferencia anual en noviembre, se ofreció una sombría prognosis debido a que la Cuenca del Mekong en las últimas décadas “ha estado experimentando severas sequías con graves pérdidas económicas debido a daños a cosechas agrícolas, el impacto adverso sobre el ambiente y los efectos sobre la subsistencia de los habitantes locales”.
“La duración y la severidad de las repercusiones han aumentado significativamente las últimas dos décadas al comparar la condición de sequía de una temporada a otra”, añadió el texto.
Advirtió que, dependiendo del clima imperante, la Cuenca del Mekong “probablemente sufrirá sequías severas los próximos 30, 60 y 90 años debido a menos precipitación, altas temperaturas” y el alto nivel de evaporación proveniente de suelos y plantas.
El tema de las represas se hizo patente hace un mes cuando el Mekong adquirió un tono acuamarino al aclararse el agua y reflejar el cielo, en vez de su usual color ocre generado por los sedimentos que la corriente arrastra.
