MADRID, 4 (EUROPA PRESS)
El presidente de Rusia, Vladimir Putin, ha declarado este jueves el estado de emergencia por el vertido de 21.000 toneladas de petróleo diésel en un río de la ciudad siberiana de Norilsk, en el Ártico.
El derrame se produjo el pasado viernes a causa de un accidente en la central termoeléctrica de Norilsk y podría ser el mayor vertido registrado en la historia en la zona del Ártico ruso, según informaciones de la agencia de noticias TASS.
«Estoy de acuerdo con la propuesta de declarar el estado de emergencia», ha aseverado Putin tras una conversación con el ministro de Emergencias de Rusia, Evgeni Zinichev, que había recalcado la importancia de tomar esta medida para hacer frente a lo que muchos ya consideran un desastre medioambiental.
En este sentido, el presidente ha criticado a las autoridades locales de la región de Krasnoyarsk por dar una respuesta «tardía» al derrame y ha insistido en que esto ha provocado la indignación de las autoridades a nivel federal, que se enteraron del suceso a través de las redes sociales.
«¿Por qué las autoridades se enteraron de esto dos días tarde? ¿Vamos a empezar a enterarnos de las emergencias a través de las redes sociales? ¿Tenemos un problema o algo?», ha manifestado Putin durante una rueda de prensa.
A pesar de que el derrame tuvo lugar el 29 de mayo cuando se produjo la pérdida de contención del tanque de combustible de la planta, el Ministerio de Emergencias no supo del incidente hasta el 31 de mayo.
Según la empresa refinadora Nornickel, la descongelación del suelo de permafrost había causado daños al tanque de almacenamiento, lo que provocó el incidente.
«El tanque de almacenamiento tiene muchos años y las obras se llevan a cabo en el permafrost, por lo que el monitoreo debe realizarse de manera permanente y la pregunta es si esto se llevó a cabo», ha advertido el director del Instituto de Ecología de la Escuela Superior de Economía, Boris Morgunov.
Nornickel ha indicado que el vertido podría retirarse en un periodo de entre diez y catorce días, aunque el ministro de Recursos Naturales, Dimitri Kobilkin, ha expresado dudas sobre si la completa eliminación del crudo es posible.
El Servicio de Salvamento Marítimo de Rusia ha comunicado este mismo jueves de que por el momento se han retirado 100 toneladas del diésel que se vertió, según informaciones de la agencia Sputnik.
«Se recuperaron más de 100 toneladas de combustible diésel de la superficie del río y se colocaron seis barreras flotantes», ha señalado un portavoz de la institución, que ha precisado que en el lugar se encuentran trabajando 16 empleados de la entidad mientras se estudia la incorporación de un equipo del Ministerio de Emergencias y de expertos de otras organizaciones.
«Los expertos (…) dicen que bastan 14 días con la condición de que el viento favorezca un poco la operación. La dirección del viento cambia constantemente, esperamos que el viento arrastre la mancha hacia las barreras flotantes para recuperar el combustible. Pero a veces el viento sopla en la dirección contraria y la mancha se expande», ha explicado Sergei Diachenko, vicepresidente de Nornickel.
En cualquier caso, ha añadido, «la situación está bajo control». Diachenko ha agradecido al Servicio de Salvamento Marítimo su rápida respuesta a la emergencia.