El pasado 24 de junio un joven de 31 años fue asesinado, aparentemente a manos de su pareja sentimental e identificado como Manuel Enrique Muela Luna, quien cometió un homicidio similar en Colorado, Estados Unidos, hace 28 años cuando le quitó la vida a su sobrino quien se alejó de él para casarse.
- Te puede interesar: Arturo Herrera, secretario de Hacienda, da positivo a Covid-19
El homicidio del pasado miércoles ocurrió en la Zona Rosa, en la alcaldía Cuauhtémoc de la Ciudad de México, alrededor de las 01:30 horas la hermana de Omar ‘N’ trató de localizarlo, pero no tuvo éxito.
La última vez que lo contactó fue poco después del sismo del martes por la mañana, cuando el joven le dijo que se encontraba bien, pero horas después perdió todo contacto.
Fue debido a esto que la mujer fue a buscarlo a su departamento, localizado en la calle Estrasburgo, pero nadie le abrió, tampoco estaba su camioneta estacionada en la calle.
Con ayuda de la policía forzó la chapa del departamento, en una de las habitaciones encontraron a Omar sin vida con las manos atadas, por lo que para su hermana el principal sospechosos es Manuel Enrique.
- También puedes leer: ¿Qué cárteles del narcotráfico operan en el Valle de México?
Incluso una vecina informó que el presunto asesino se disculpó con ella por el ruido excesivo de la pelea que tuvo con Omar, poco después se retiró en la camioneta de la víctima.
¿Por qué estaba libre Manuel Enrique?
De acuerdo con reportes periodísticos, tras el primer homicidio el hombre fue detenido diez años después en Ramos Arizpe, Chihuahua, ya que contaba con una orden de captura para ser extraditado.
La razón de haberle quitado la vida a su sobrino, con quien vivía, se debió a que abusaba sexualmente de él, por lo que vio en el matrimonio una forma de escapar de su tío, pero Manuel Enrique le disparó en la cara, calcinó su cuerpo y huyó a México.
Cuando fue capturado en Ramos Arizpe, el gobierno mexicano se negó a extraditarlo, ya que en ese entonces la pena de muerte estaba vigente en Colorado, por lo que fue juzgado bajo las leyes mexicanas y en 2005 fue condenado a 27 años y seis meses de prisión.
Pero fue liberado y retomó su vida en la Ciudad de México, en donde el miércoles le quitó la vida a su pareja, quien era un activista de la comunidad LGBT+ y trabajador de un banco.
(Con información de El Universal)