Dejar de pagar el gym no es una opción legal ni la mejor decisión económica; y aunque no tengas dinero o te hayas quedado sin trabajo por culpa de la pandemia del Covid-19, el establecimiento tiene derecho a realizar los cobros pendientes.
Ello, debido que –al ingresar al gimnasio- firmaste un contrato de adhesión; donde aceptaste y te comprometiste a pagar las mensualidades; y a cubrir las sanciones correspondientes en caso de incumplimiento, retraso o cancelación anticipada.
El director del despacho Hernández Reyes y Asociados, Joel Hernández Reyes, explicó a Publimetro que este tipo de problemas surgen porque 90% de los clientes o consumidores no leen los contratos, antes de firmarlos.
Indicó que al aceptar un contrato de adhesión, el cliente se adhiere de forma estricta y forzosa a cada una de las cláusulas; donde se fijan los escenarios de servicio, pagos, formas de cobro y penalizaciones aplicables.
De tal suerte, apuntó el especialista, que los gimnasios están en su derecho de hacer valer los cobros acordados; y realizar los cargos a la tarjeta de crédito o débito del socio; cuyas cuentas y permisos fueron proporcionados al firmar el contrato.
El gym también puede buscar al cliente a través del número telefónico, domicilio, y hasta redes sociales que fueron asentados en el mismo contrato o expediente; y en su caso solicitar la liquidación de los gastos que esta búsqueda genere.
“Si no pagas, hay cuotas o sanciones que van desde un porcentaje de las mensualidades incumplidas, hasta el pago total de las mismas, más una compensación.
“Y si ya te hicieron los cargos a tu tarjeta y no pagas; el problema escala al banco; que no sólo te cobrará los montos determinados en el contrato, sino los intereses; y hasta las comisiones por pago tardío o incumplimiento de tus obligaciones”, explico Joel Hernández
Opciones para darle la vuelta al gym
El director del despacho Hernández Reyes y Asociados explicó que hay tres opciones básicas para reducir los pagos al gimnasio o dejar de pagar algunos de ellos:
- Negocia con el gerente o representante legal del gym; explícale tu caso y solicita –sin pelear- que reduzca el monto de las penalizaciones y / o mensualidades; a cambio de que tú pagues en tiempo y forma lo que resulte de la negociación.
- Antes de pedirle al banco que cancele o acepte los cobros del gym en tu tarjeta; lee tu contrato, localiza las penalizaciones por incumplimiento o cancelación y evalúa el costo de tal decisión; que en algún momento pueden pasar a los molestos despachos de cobranza.
- Si tienes dudas o eres víctima de algún abuso, acude a la Profeco o a la Condusef; donde te pueden asesorar; y de ser necesario abrir un proceso de conciliación; donde las dos partes cedan y lleguen a un acuerdo para finiquitar el problema; con el menor costo posible. El trámite lo puedes hacer por Internet y el caso puede resolverse en un promedio de 30 días.