Sentado desde la comodidad de su sala, el primer actor Ignacio López Tarso, se muestra pleno al cumplir 96 años de vida el pasado 15 de enero rodeado de sus hijos, nietos y bisnietos, quienes le celebraron con una pequeña reunión en el jardín de su casa en la Ciudad de México.
“Pues estoy muy bien para 96 años, no me duele nada, tengo vigilancia médica cuando lo necesito, llamo a doctores militares que me atienden en todo, de manera que para los 96 años, pues estoy bastante bien”, dijo en exclusiva a JDS don Ignacio.
Sin embargo, lo único que sí le falla es que no escucha bien, además de que ya no puede comer ni tomar ciertas cosas por una dieta estricta que lleva para mantenerse fuerte.
“Estoy un poco sordo, tengo problema de gastritis que me operaron hace años, llevo dieta, no puedo comer cosas irritantes, no puedo beber cosas fuertes, pero fuera de eso la paso más o menos bien, vivo bien”, indicó con una lucidez que muchas personas no tienen a su edad.
El año pasado el primer actor decidido unirse al mundo digital abriendo su cuenta de Facebook y hoy goza de tener más de 80 mil nuevos amigos virtuales donde da cuenta de sus días y las cuatro obras de teatro que ha hecho hasta el momento desde su casa, a falta de un escenario que tanto extraña.

“Lo extraño mucho, en mis 72 años como actor es la primera vez que paso año y medio sin pisar un escenario y no puede ser de otra manera, hay que esperar a que esto mejore y lo haré de nuevo encantado”, abundó el protagonista de la película “Macario”.
Algo de lo goza gracias a la vida plena y saludable que lleva es tener excelente memoria y lo demuestra en cada una de sus obras de teatro que presenta. “Siempre he tenido buena memoria, el teatro siempre es texto aprendido de memoria, ya no hay apuntador en el escenario, sólo se usa en la televisión”.

Y ante la incertidumbre por la pandemia que se vive en el mundo, Don Ignacio aw cuida a la máxima potencia para evitar contagiarse. “No he salido para nada, no recibo visitas, no visito a nadie, tuve que ir al médico una vez y no es salido para nada”, apuntó el histrión perteneciente a la Época de Oro del cine mexicano.
Y ahora que ya le toca registrarse para la vacuna contra el Covid-19, pide ser inmunizado por una enfermera sexy, sobre todo que tenga buen pulso y sepa inyectar muy bien.

“Que venga una chica guapa y que me inyecte de inmediato estoy a disposición (risas). Bien hecha, bonito cuerpo, bonita cara, boca carnosa, provocativa buen pulso para inyectar”, señaló sonriente Don Ignacio López Tarso quien confía en llegar si la vida se lo permite a los 100 años de vida.