Con la aprobación de la “Ley Agnes”, colectivos piden que las autoridades en Puebla garanticen que en la práctica el reconocimiento de la identidad autopercibida en las personas tránsgenero no siga generando discriminación en los centros de salud, en el ambiente laborar y de acceso a diversos derechos
Este jueves el Pleno del Congreso del Estado aprobó la iniciativa en la cual se reconoce el cambio de identidad de género de las personas trans en documentos oficiales; sin embargo esta solo es una arista de la serie de derechos por lo que este grupo ha luchado.
El dictamen fue aprobado con 34 votos a favor y seis abstenciones en lo general en una discusión que duró al menos cuatro horas en la sesión.
La iniciativa presentada por las diputadas de Morena, Estefanía Rodríguez Sandoval y Vianey García Romero, plantea reformar y adicionar diversas disposiciones del Código Civil para el Estado de Puebla en las que se puede enmendar, modificar el nombre y el reconocimiento de la identidad de género autopercibida de una persona en el acta de nacimiento.
El artículo 875 Ter señala que para solicitar el levantamiento de una nueva acta de nacimiento, se deberá tener 18 años de edad cumplidos; manifestar nombre completo y los datos registrales asentados en el acta primigenia y manifestar el nombre sin apellidos y el género solicitados.
La identidad percibida incluye la vivencia personal del cuerpo, que podría o no involucrar la modificación de la apariencia o funcionalidad corporal, siempre que la misma sea libremente elegida.
En entrevista con Publimetro, Vanessa, integrante de la Coordinadora Feminista en Puebla comentó que a pesar de que esta inicativa genera menor dificultad en los proceso para adquirir los mismos papeles que una persona heterosexual, lo cierto es que en la práctica hay mucha discriminación en las empresas que ofertan trabajos, así como en centros médicos y otros espacios.
Ante esto, consideró que las autoridades en el estado deberán garantizar que el documento garantice el derecho a la no discriminación por su identidad sexogenérica.
La activista añadió que por otro lado están los transfeminicidios, pues debido a la precariedad en la que viven las personas transgénero, su esperanza de vida es hasta los 35 a 40 años por todo el ambiente de discriminación que se puede tornar en asesinatos o suicidios, destacando que en México el 46% de las personas trans mueren a causa de la discriminación.
“México es el segundo país con más transfeminicidios (…) por lo que estamos luchando ahorita es apenas una de las tantas cosas que se tienen que hacer en general”, comentó.
La iniciativa cobró vida en honor de la activista trans, Agnes Torres Hernández, quien promovió el cambio de identidad. Fue asesinada el 9 de marzo de 2012 y su caso aún no tiene justicia pues a pesar de tener al presunto homicida intelectual aún no se le dicta sentencia.
Puebla se convierte en la entidad número 14 en México en permitir este reconocimiento y se suma a Ciudad de México (el primer lugar que avaló y aprobó en 2008 reformas similares a la Ley Agnes), Coahuila, Nayarit, Michoacán, Colima, Hidalgo, San Luis Potosí, Sinaloa, Sonora, Oaxaca, Jalisco, Tlaxcala y Quintana Roo.
A favor:
“Tenemos la obligación de legislar para todas y todos sin distinción, reconocer el derecho de todas las personas de solicitar el reconocimiento de identidad autopercibida, así como la serie de trámites y requisitos para su reconocimiento”, diputada Mónica Lara Chávez
En contra:
¿Tendrán una o doble credencial, que tratamiento estaríamos dando, porque la doble identidad da pie a doble identidad con la que se pueden cometer delitos”, diputado Héctor Alonso.
