Una fiesta con más de 150 jóvenes reunidos en un domicilio, en plena pandemia, fue suspendida por autoridades de Santa Catarina, la madrugada de este domingo.
En respuesta inmediata a las denuncias por “vecinos ruidosos”, el gobierno de Santa Catarina intensificó el operativo “Poco Ruido, Muchas Gracias” con el que suspendió la reunión que se realizaba en una vivienda de la colonia Privadas de San Jorge.
Además de no respetar los protocolos de sana distancia, los asistentes a la reunión tampoco portaban cubrebocas.
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Los inspectores y los policías municipales retiraron a los jóvenes entre los que se encontraban menores de edad.
Los vecinos fueron los que se quejaron de la reunión ruidosa y con un número excesivo de asistentes.
Con el apoyo de los uniformados, los inspectores desalojaron a los jóvenes que estaban en el domicilio, localizado sobre la calle Las Palmas por infringir los protocolos sanitarios en medio de la pandemia de Covid-19. Además de que el ruido interferiría con el descanso de las familias del sector.
El personal de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Ecología levantó una acta en contra de los propietarios del domicilio por no respetar el reglamento ambiental al rebasar los decibeles permitidos y por el hacinamiento.
