El 23 de marzo de 2020 se decretó la Jornada Nacional de Sana Distancia en territorio nacional y la capital del país inició el semáforo epidemiológico en color rojo ‘de máxima alerta de contagio de Covid-19’, situación que obligó al confinamiento de los ciudadanos y por ende al cierre de actividades.
Desde esa fecha, los capitalinos no han logrado pasar de un semáforo naranja, incluso en diciembre pasado un repunte hizo retroceder a rojo por ocho semanas y ahora la ciudad sigue ‘sin bajar la guardia’. Continúan las medidas sanitarias y aún quedan algunas actividades por reaperturar.
En esta línea, la salud mental ha sido la otra víctima del Covid-19 para los habitantes de la Ciudad de México, algo que refleja el Consejo Ciudadano para la Seguridad y Justicia capitalino en sus cifras, cuyos número reportan un un aumento en 238% de atenciones psicológicas a un año del confinamiento.
En entrevista con Publimetro, el presidente del Consejo Ciudadano, Salvador Guerrero Chiprés, señaló que de marzo del 2020 al mismo mes, pero del año en curso, ha atendido a 37 mil 310 personas con asuntos de carácter psicológico, la mayoría, mujeres, 65%, contra 28% de hombres.
Las principales problemáticas atendidas son:
- Problemas/Ruptura de pareja: 13%
- Ansiedad: 10%
- Problemas familiares: 9%
- Fatiga pandémica: 8%
- Depresión: 8%
- Violencia: 5.5%
- Miedo o incertidumbre: 5%
- Duelo: 3.5%
- Tentativa suicida: 3%
- Tristeza: 2%
«Tenemos un récord de llamadas, una que duró dos horas 38 minutos. Con la plataforma el Consejo básicamente plantea que todo mundo tiene derecho a la salud, no debemos tener pena por hablar de los problemas que experimentamos y en la medida que reconozcamos que tenemos derecho a la salud mental como física en este contexto de pandemia podemos construir a la salud integral de mejor manera», señaló Guerrero Chiprés.
‘Un año de madurez’
Cuestionado por la enseñanzas que nos ha dejado en la capital un año de confinamiento, el presidente del Consejo Ciudadano aseguró que ha sido un año de madurez que evidencio que todas las vulnerabilidades son legítimas y pueden ser atendidas si se acepta con conciencia que tiene solución.
Esta madurez, dijo se pondrá a prueba en el próximo periodo vacacional por Semana Santa, una oportunidad de fortalecer la tendencia a la baja de contagios, hospitalizados y muertos por conoravirus en la ciudad.
«Hemos ganado en madurez y seguramente se va a demostrar en nuestro cuidado, cautela para aprovechar la Semana Santa para un fortalecimiento familiar, cauteloso, responsable y atento a ser solidarios con los demás no arriesgando la salud y aquello que ya se ha ganado este año», añadió.
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