En dos años las finanzas de México caerán en crisis, si no establecen medidas tributarias y fiscales que incentiven el crecimiento, la inversión, la formalidad y la creación de empleos, alertaron especialistas consultados por Publimetro.
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Advirtieron que los problemas de evasión de impuestos, que llegan a 1.4 billones de pesos; la pobre recaudación, de apenas 16.5% del PIB y las pérdidas que genera la informalidad, llevarán a país a una disyuntiva: aumentar impuestos o contratar deuda pública.
El especialista en Economía y Finanzas de la Escuela Bancaria y Comercial (EBC), Ramón Martínez, explicó que en 2020 y 2021 el cobro de adeudos fiscales a los grandes empresarios y los recortes al gasto publico permitieron al país tener “un balance apretado” en materia finanzas.
Recordó que los adeudos de las empresas representaron 56% de los impuestos cobrados por el SAT, durante el primer trimestre del año; pero –apuntó- estas opciones se agotan y no permitirán que el país enfrente sus necesidades de gasto y provisión de servicios.
Modelo insostenible
El epecialista de la EBC indicó que tributario actual «es insostenible». Subrayó que en algún momento el gobierno y el Congreso deberán tomar la decisión de qué cosas dejamos de hacer; porque no hay dinero suficiente ni para continuar los proyectos de infraestructura del presidente como el Tren Maya o el Aeropuerto Felipe Ángeles.
“En 2022 es muy probable que veamos los primeros recortes fuertes al gasto. Pero no hay mucho de donde recortar; ya se hicieron recortes al sector salud, educción, a los beneficios al sector empresarial y a infraestructura.
“Y todo esto traerá una crisis en los ingresos que deberán ajustarse nuevamente sobre lo ya ajustado en 2020 y 2021; cuyo impacto reduce el crecimiento económico, las inversiones, la creación de empleos y el bienestar de las familias”, alertó Ramón Martínez.
Urgente formalizar a negocios y personas
El investigador de la Facultad de Negocios de la Universidad La Salle, Carlos Alberto Bautista, explicó reducir informalidad económica es el reto y la urgencia número uno del país, ante los hoyos que enfrentan las finanzas y las pocas opciones de ingresos públicos.
Explicó que 40% de la economía nacional está en manos de la informalidad; en negocios, empresas y personas que no pagan impuestos; pero que demandan servicios públicos.
Indicó que el SAT tiene un objetivo muy claro: aumentar la recaudación de todas las formas; desde los adeudos a los grandes contribuyentes, hasta el impuesto a las ventas y plataformas digitales; pero olvida la necesidad de ampliar la base de contribuyentes, a través de la formalización de la informalidad.
Apuntó que mientras las empresas y personas, pagan tasas de hasta 30% y 35% de ISR, los informales–que van desde comerciantes hasta empresas- no pagan ni un solo peso de impuestos.
Sin crecimiento no hay más impuestos
Guillermo Mendieta González, integrante de la comisión técnica de auditoría fiscal del Colegio de Contadores Públicos de México (CCPM), señaló que –antes de pensar en una reforma fiscal o tributaria– lo que se necesita es que la economía crezca.
Indicó que, para generar mayores ingresos públicos, primero las empresas, negocios y personas deben recuperarse de la crisis desatada por la pandemia, crecer y generar más recursos.
Apuntó que, para lograr esta última meta se requieren incentivos fiscales, como la deducción de prestaciones, que hoy rondan 40% y que pueden pasar a 80%. Esto con el fin de que las empresas crezcan, abran nuevos empleos, mejore la economía familiar y con ello, elevar la recaudación.
Subrayó que los ingresos de las grandes y pequeñas empresas, como personas físicas, no pueden elevar más sus contribuciones; y ante el impacto de la crisis del Covid-19 le dirían al SAT: “debo no niego, pago no tengo”.
Focos rojos en las finanzas
Los estudios de la OCDE, Cepal, SAT e Inegi evidenciaron que las finanzas públicas de México enfrentan los siguientes focos rojos:
- 16.5% de recaudación tributaria; equivalente a tercera parte del 42% de Cuba o la mitad del 33.3% de Barbados y Brasil. También está lejos del 33.8% de la OCDE.
- 1.4 billones de pesos cuesta la evasión de impuestos en México; de los cuales 50% proviene o es causada por los grandes contribuyentes.
- 30.5 millones de trabajadores están en la informalidad y no pagan impuestos; lo que detiene el crecimiento y se fortalece como un problema estructural.
- 62.3% de los negocios, de un total de 6.3 millones, tampoco contribuyen; y esto también deja pérdidas graves.
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