Ronda Rousey es actualmente, la deportista mejor pagada de la UFC. La campeona de Peso Gallo de Mujeres recibe millones y millones de dólares por sus peleas, además de conceptos de publicidad y patrocinadores.
Pero en sus comienzos, sólo peleaba para poder comprarse este delicioso postre:
En una entrevista para “Sports Illustrated”, “Rowdy” confesó que en su juventud peleaba contra hombres con el objetivo de ganar dinero para irse a comprar frappucinos.
“Amaba los frappuccinos. Mi amiga Jackie y yo salíamos de paseo luego de la escuela. Jackie era como mi Paul Heyman. Ella decía: ‘mi chica puede venir aquí y vencerte por 10 dólares, o 5 dólares, o lo que sea’. Y siempre había algún chico que aceptaba”, explicó la campeona invicta.
Así, Ronda comenzó a aplicar sus hoy ya famosas llaves de rendición y demostró su talento ante hombres, todo por poder disfrutar de su café.
“Fuera quien fuera el chico, yo lo lanzaba al piso y le aplicaba una estrangulación o una palanca al brazo. Lo hacíamos hasta que se daba por vencido, tomábamos su dinero y después comprábamos frappuccinos. Esas fueron mis primeras peleas profesionales”, añadió.
Antes de llegar a la UFC (en 2013), Ronda practicó el judo y fue medallista olímpica de bronce en Beijing 2008, y también, participó en “Strikerforce”. Ahora, defenderá su título ante Holly Holm en “UFC 193″ el próximo 15 de noviembre.
VIDEO: Árbitro saca arma de fuego en pleno partido