Al Instituto Electoral del Estado de México arribaron en punto de las 20:00 horas, Alfredo del Mazo de la coalición PRI, PANAL, PVEM y PES; Josefina Vázquez Mota del PAN; Delfina Gómez de Morena; Teresa Castell como independiente; Juan Zepeda del PRD y Óscar González del PT.
Seguridad pública y justicia social; combate a la corrupción y desarrollo social fueron los ejes temáticos sobre los que giró el discurso de cada participante.
Momentos clave
El primer dardo político lo lanzó la candidata Josefina Vázquez Mota, quien siguiendo la denuncia hecha por el dirigente nacional del PAN, Ricardo Anaya Cortés, señaló que la candidata Delfina Gómez desvió más de 13 millones de pesos de la nómina de sus empleados durante su dirigencia en el Ayuntamiento de Texcoco.
Entre dos y nueve años de cárcel advirtió Vázquez Mota a Delfina que podría devenir el delito.
Por su parte, la candidata independiente Teresa Castell, fue enfática en declarar las bondades que supone una visión alterna al tradicional sistema de partidos. Cuestionó en repetidas ocasiones a los aspirantes por sus escándalos de corrupción y promesas incumplidas.
Contra Alfredo del Mazo fueron sistemáticas las acusaciones por su presunta vinculación con los escándalos de corrupción del Grupo Higa, la casa blanca y OHL, quien a renglón seguido se defendió recordando a Delfina Gómez el reciente video que circuló de Eva Cadena, la ex candidata a la presidencia municipal de Las Choapas, que recibió medio millón de pesos en nombre de Morena.
De su lado, el perredista Juan Zepeda evidenció los altos índices de inseguridad de Huixquilucán donde gobernó Alfredo del Mazo en relación con Nezahualcóyotl bajo el mando del PRD. “Nosotros sí sabemos gobernar” señaló Zepeda Hernández.
Habrá segunda versión
Así lo anunció Javier solórzano al término de la mesa de discusión sin precisar fecha y agradeció la participación de lo invitados.
¿Quién ganó?
Publimetro consultó al académico de la FCPyS-UNAM y consultor Político, Gerson Hernández quien enjuició este primer debate entre el tedio y lo inoportuno. En sus términos, una suerte de parálisis política.
“Nadie ganó. Observamos un formato acartonado, dónde el mismo moderador se contagió de la parálisis política. El formato del debate fue poco dinámico, lo que vimos fue una cadena de declaraciones que leían de sus hojas” señaló Hernández”
En relación con las expectativas que tenían medios, líderes de opinión y ciudadanos de este primer debate agregó,
“La comunicación política te tiene que generar emociones; lo que vimos fue a políticos tradicionales que comunican propagandas masturbatorias, mensajes para sus seguidores; quienes se apoyaron con o márgenes y letras chiquitas que no se entendían”
Y finalmente, acotó, “de acuerdo con la autoridad electoral menos de uno de cada 10 mexicanos observan los debates; y este ejercicio corrobora esa estadística”.
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