El ajetreado ritmo de vida que tenemos en la actualidad, nos mantiene en un estado de alerta constante y siempre listos para asumir el siguiente reto. Nuestra estancia en el hogar a veces es tan breve que en ocasiones no reparamos en que vamos perdiendo poco a poco la armonía y sentimos un impulso irrefrenable de salir a la calle. La casa debería ser nuestro refugio, pero no siempre es así. Esto ocurre porque no está armonizado. Si bien el color y la decoración son vitales, también lo son otros factores que contribuyan a tener un hogar espiritual y en armonía.
En entrevista para Interiorismo, Grace Valenzzo, consultora en terapias energéticas y sanadoras, nos comparte la trascendencia de tener objetos que nos ayuden a armonizar nuestro hogar: “La casa es una extensión de nuestra persona, el orden o desorden en el espacio personal refleja en cierta medida nuestras necesidades, preocupaciones, estados emocionales. En la cultura oriental, principalmente en los países asiáticos, existe un dogma llamado Feng Shui que se basa esencialmente en el acomodo de los objetos en relación con los elementos de la naturaleza, los puntos cardinales y el Ba-gua, que son las zonas de las diferentes áreas de la vida de una persona”.
Y es que de acuerdo con el Feng Shui, siempre que pensemos en nuestro hogar, debemos hacerlo imaginando que se trata de una persona: puertas y ventanas serían ojos y boca; pasillos y corredores serían las venas y arterias. Hay acciones muy sencillas, pero claves para la armonización del hogar, entre las que Valenzzo destaca las siguientes:
Conservar la casa en orden
Parece algo fácil de lograr, pero para muchos no lo es. Los espacios en constante desorden provocan que la energía se estanque. Consciente o inconscientemente comenzamos a evitarlos al grado de no querer estar en casa al sentirnos abrumados por el desorden.
Evitar acumulación de objetos
Todos tenemos grandes colecciones de piezas que representan parte de nuestros gustos y vivencias. Sin embargo, las cosas rotas o viejas de las que nos negamos a deshacernos por distintos motivos, también son la causa de que la energía se estanque. Muy pocas veces reflexionamos que estos objetos cumplieron su función dentro de nuestro hogar y conservarlos en estado de deterioro causan una baja frecuencia, atrayendo negatividades.
Mantener el hogar siempre bien ventilado
Si tu hogar permanece constantemente cerrado y poco ventilado, es muy probable que la energía de tu hogar quede atrapada y cause cansancio y otros malestares. Para que esto no ocurra es vital abrir las ventanas y sacudir las esquinas de la habitación.
Imágenes que te generen sentimientos positivos
Solemos poner especial atención en que aquellos objetos que nos rodean dentro de nuestro hogar sean armónicos con los colores de los muros, los muebles y, en general, con el estilo de la casa, aunque muy poca atención ponemos en si esas imágenes que vemos constantemente en nuestro espacio habitacional nos hacen felices. Analiza bien y si no te generan emociones positivas cámbialos por otros que sí lo hagan.
La experta también enfatiza si es fundamental o no cambiar de forma constante la decoración de nuestro hogar: “Lo importante está en tener elementos que sean prácticos para nosotros y en buen estado así como limpios y funcionales”. Finalmente Valenzzo recomienda comenzar a armonizar tu hogar desde la puerta: “La entrada de la casa es el área por donde entra toda la energía, la cocina de acuerdo hacia dónde esté orientada, es la que tiene relación con nuestra economía y la recámara tiene relación con nuestra salud y energía vital, así que no debemos permitir que ningún espacio pierda armonía”.