Después de sufrir una mala noche, Jesús Corona amaneció este jueves con la tranquilidad de saber que sólo fue una pesadilla y que su participación en el Mundial no está en riesgo.
El portero de la Selección Mexicana, que viajó a Estados Unidos con un collarín puesto por protección, pensó lo peor después del golpe que recibió. Sin embargo, con el pasar de las horas se fue calmando y ahora se siente bien y preparado para recuperarse.
“Al principio sí (pensé que era mayor el problema), pero ya después me fui dando cuenta que todo estaba bien.
“Me siento bien, yo espero estar listo según lo que me dijo el doctor estaré en dos días”, dijo Corona.
Mientras tanto, Héctor González Iñárritu aseguró que vio a Corona confiando y motivado después de saber que sólo fue un susto.
“El ánimo de Chuy está bien, es un tipo muy fuerte, llegó caminando, sonriente y con un poquito de molestia en el cuello.
“Nada más se le darán analgésicos, antiinflamatorios y vamos a llevar varios aparatos para darle masajes musculares, para que se le relajen los músculos que están un poco contracturados y en dos días ya puede empezar a trabajar otra vez”, indicó el directivo.
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