Una situación muy curiosa se suscitó en Nuevo León luego de que los candidatos al senado de los partidos políticos PRI y Morena impugnaran la victoria de Samuel García de Movimiento Ciudadano por haber portado las playeras de Tigres y la selección mexicana durante la campaña.
La acusación gira en torno a los patrocinios que aparecen en las prendas, pues los acusadores afirman que García debió a haber pagado 76 millones de pesos a las marcas para poder utilizarlas (cantidad que rebasa los topes de campaña).
De acuerdo a la versión de Samuel, que denunció el acto a través de una grabación en vivo que hizo en su cuenta de Facebook, el INE atendió a los quejosos y envió una serie de requerimientos a las marcas que aparecen en la playeras de futbol para preguntarles si habían recibido dinero del político o si le habían extendido algún contrato para utilizar la camiseta, y la respuesta fue que no.
Aún así, el caso se está resolviendo en la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación. Mira el video:
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