Viajó de Japón para apoyar a Boca y se suspende la final

Todo parecía un sueño que en horas se convertiría en realidad. Ver al equipo de sus amores disputando la final de la Copa Libertadores ante su acérrimo rival en su propia casa pudo solo pasar por su mente infinidad de ocasiones, pero este sábado 10 de noviembre de 2018 en la Bombonera se escribiría el tan anhelado pensamiento, pero no tuvo un final feliz y, mucho menos, un comienzo.

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Se trata del japonés Isamu Kato, quien tomó la decisión de viajar desde Japón hasta Argentina para alentar a Boca Juniors que se mediría en su casa y con su gente a River Plate en una final de ensueño.

El nipón inició su travesía y en sus respectivas redes sociales publicó la felicidad que llevaba por presenciar el partido más importante de su vida, pero no esperaba que a su llegada a Buenos Aires todo se convertiría en un tormento.

El estadio Bombonera explotaba con sus aficionados desde horas antes de que se rodara el balón por primera vez entre ambos clubes en el certamen más importante de América dentro del balompié, cuando la lluvia hizo de las suyas y destruyó toda ilusión de disfrutar del duelo.

Al ver que el clima empeoraba y el cielo «se caía» por la tormenta que se presentó, la Conmebol dio a conocer que no se podría disputar el encuentro y se suspendería por obvias razones.

El oriental llegó «anoche a las 11 (mañana) y a las 11 de la noche salgo para Japón. Vine por el partido. De día fueron 33 horas y en total 60. Le pedí a mi jefe que tomaría unos días de vacaciones para ir a Argentina. Le expliqué sobre el partido más importante de mi vida».

El aficionado Isamu Kato se gastó 2 mil 400 dólares y tomó la decisión de volar desde su país natal a Sudamérica cuando «Boca tomó el boleto» para ser el segundo finalista del campeonato.

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