Los feminicidios no cesan en Puebla, en esta ocasión de trata del asesinato de Lorena Salazar de 32 años y Luisa Cortés de 28, la primera de ellas embarazada y apuñalada en el vientre tres veces presuntamente por su pareja sentimental, quien terminó de matarla de dos tiros en la cabeza.
Luisa perdió la vida a causa de una herida en el cuello con un arma blanca cuando intentaba proteger a su amiga.
El fin de semana, los vecinos al escuchar las detonaciones solicitaron ayuda al 911, pero el personal de auxilio se presentó dos horas después, aunque el lugar de los hechos está a sólo dos cuadras de la presidencia municipal de Tehuacán.
Lorena y su amiga Luisa Cortés se disponían a comer cuando fueron atacadas por un grupo de hombres en el domicilio ubicado en la avenida Héroes de la Independencia en la colonia Guadalupe Hidalgo, en donde ambas trabajaban como empleadas domésticas.
Aunque en primera instancia se hablaba de que los asesinatos fueron resultado de un asalto, esa línea de investigación se descartó por los signos de violencia contra Lorena y se centró como principal sospechoso a su pareja sentimental, aunque se desconoce si era el padre del bebé de ocho meses de gestación.
Los vecinos, al escuchar las detonaciones llamaron al 911, sin embargo, el asesino tuvo el tiempo suficiente para huir porque los grupos de auxilio se presentaron dos horas más tarde.
De enero de 2017 a la fecha, al menos 109 mujeres han sido asesinadas en la entidad, pero no todos los casos han sido tipificados por la autoridad como feminicidios. Tehuacán, después de la capital es la región con el mayor número de feminicidios
Además de Lorena Salazar, el año pasado otras cinco mujeres embarazadas fueron asesinadas por sus parejas en la entidad: Dulce Castillo, Yuridia Navarrete, Jessica Pérez, Mercedes «N» y Giselín López, de 24, 40, 19, 26 y 23 años de edad, respectivamente.
