La Universidad de las Américas Puebla (Udlap) respaldó a Luis Ernesto Derbez como rector de la institución, aunque aceptó su separación del cargo para que responda por la orden de aprehensión que se giró en su contra el miércoles pasado, ya que se le acusa de fraude para presuntamente desviar recursos de la institución.
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Por medio de un comunicado, el patronato de la fundación de esa institución también dio un voto de confianza a las demás directivos acusados del mismo delito.
Sin embargo, se nombró como rectora interina a Cecilia Anaya Berríos.
“El Patronato de la Fudlap respalda y otorga un voto de confianza a favor de Luis Ernesto Derbez, Mónica Ruiz Huerta, Mario Vallejo Pérez y Jesús Salvador Mijangos, quienes han solicitado licencia a sus funciones y se les autoriza para que respondan a los señalamientos que se han formulado en su contra y se aboquen al esclarecimientos de los hechos”.
Asimismo, se explicó que al frente del patronato está Margarita Jenkins de Landa, quien tomó dicha decisión en acuerdo con el Consejo Empresarial.
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“El patronato legitimo confía en que Luis Ernesto Derbez Bautista, su equipo directivo los abogados podrán demostrar su inocencia ante los tribunales competentes, de quienes exigimos resoluciones prontas e imparciales”.
Fue el miércoles cuando un juez poblano giró una orden de aprehensión en contra de Luis Ernesto Derbez, quien fue secretario de Relaciones Exteriores en el gobierno de Vicente Fox, ya que se le acusa de fraude durante su gestión como rector de la universidad.
Según versiones periodísticas, en 2016 Derbez y los demás acusados al parecer crearon una red de empresas, entre ellas la ULAP Jenkins Graduate School, por medio de la cual se habrían desviado unos 100 millones de pesos de la Fundación Mary Street Jenkins.
La Fundación Mary Street Jenkins acusó que la orden de aprehensión se trata de una “persecución política” por parte del gobernador de Puebla, Miguel Barbosa Huerta, quien tiene a su alcance la fabricación de este tipo de mecanismos y desviar la atención sobre la negativa al cumplimiento de la orden de devolver la institución al patronato.
