Por Eduardo Navarrete, Editor General de la Revista DÓNDE IR @editordondeir
Paso 1. Compréndelo. Tener este diario en tus manos es una proeza. Desde que surge la idea de un texto, pasando por la cobertura, la selección, edición, diseño, impresión, hasta que llega a ti. Y no queda así: un diario es una bandeja de sorpresas, escalofríos, aventuras y diálogos en potencia conformados por los editores, quienes buscan generar reacciones específicas: sonrisa, coraje, indignación, confianza…
Paso 2. La portada. Cada portada es minuciosamente discutida, peleada, auditada y confeccionada. Si crees que sale a la primera o de modo espontáneo, no hay nada más lejano a eso. Sólo lo más relevante es lo que llega aquí.
Paso 3. Las fotos. Lo primero que se lee en un diario son las fotografías. De ahí siguen los titulares o cabezas y luego los pies de foto. La foto tiene como función robarle un instante a la eternidad y congelarla en una ventana que te mueva y te invite a leer la nota.
Una buena imagen debe tener sustancia informativa, intencionalidad semántica, marco de referencia, elemento humano (personajes, o actores de la noticia), emociones intrínsecas, referentes simbólicos y por supuesto, una técnica impecable que permita que la foto sea legible (esto es, que esté enfocada, bien encuadrada, balanceada…).
Paso 4. Navega. Así como lo haces por la web, por el Pánuco o por Churubusco, aquí se trata de fluir. Y para que la lectura sea fluida, el armado de la página debe ser amable, con espacios destinados a que transite libremente tu vista y no canse.
Paso 5. Los valores. Considera este diario como una ventana de experiencias que impregnan la realidad próxima con valores de relevancia, veracidad, brevedad, utilidad, claridad e interés en cada información, sea textual o gráfica. Diariamente un ejército de personas se esfuerzan para que leas esto puntualmente.
Paso 6. Eres lo que lees. Se trata de un consumo intelectual -que en un caso óptimo- tiene dosis diarias. Y el que sea un ejercicio intelectual no lo aleja de ser divertido e interesante. Estudia cada pedazo de información que ingresas y siéntete con el poder de proponer la más pequeña idea que tengas al consumir este producto vivo, que por cierto, caduca cada 24 horas.
Aquí te dejamos la recomendación de lugares para leer este diario:
