La empresa Alstom reunió a más de 130 representantes de empresas establecidas en México interesadas en ser parte del Tren Maya.
Estas empresas buscan ser parte de los proveedores del consorcio constructor de material rodante, sistema de señalización e infraestructura para el proyecto. El primer día de la feria de proveedores del Tren Maya se realizó en las instalaciones de la planta de Ciudad Sahagún, Hidalgo.
Dentro de las áreas donde se requiere la participación de empresas para la construcción del material rodante del Tren Maya están, entre otras: interiores, componentes eléctricos, electrónicos, metalmecánica, equipos para talleres que a su vez están divididos en subcategorías que permitirán a los interesados aplicar en las áreas más adecuadas a los giros y especialidades que poseen.
Maite Ramos, directora general de Alstom México, acompañada del director General de Fonatur, Rogelio Jiménez Pons; el gobernador de Hidalgo, Omar Fayad, y otras autoridades, arrancaron las reuniones técnicas con más de 130 proveedores nacionales que presentaron sus portafolios de trabajo a especialistas del consorcio liderado por Alstom para la fabricación del Tren Maya.
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“Un tren para México, hecho en México, es el objetivo del proyecto de movilidad más ambicioso de los últimos años, un tren que refleje lo que México es actualmente: un país en crecimiento, abierto al mundo y dispuesto a mostrar su cultura a través de la modernidad, tecnología y desarrollo”.
— Maite Ramos
Las empresas seleccionadas serán sometidas a un proceso de evaluación industrial denominado Quick Industrial Assessment (QIA), con la finalidad de garantizar el cumplimiento de los lineamientos globales de Alstom.
Omar Fayad recordó que fue un día de fiesta para Hidalgo cuando supieron que el consorcio ganador para la construcción del material rodante del Tren Maya era el conformado por Alstom – Bombardier, “porque estábamos insertos en unos de los proyectos nacionales más importantes del país, este proyecto sabemos ayudará a la detonación económica a gran escala en el estado de Hidalgo”.
La construcción de este proyecto significa la creación de cuatro mil empleos directos y siete mil 500 indirectos, activando no sólo la economía de la Península de Yucatán, sino también la de varios estados donde se encuentran las operaciones de Alstom.
