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Dejan calles por apps de reparto: dealers aprovechan anonimato para mover droga y armas

Autoridades locales y federales han detectado a repartidores por apps que realizan entregas de estupefacientes y armas de fuego a discreción

Grupos de narcomenudistas usan aplicaciones de entrega de comida para transportar drogas y armas, todo con un mensaje a celular (Edgar Negrete/Edgar Negrete)

Se ofrecen a llevar cualquier tipo de mercancía sin importar la hora y la zona. Se trata de los dealers que dejaron las esquinas y casas de seguridad para distribuir droga por medio de las plataformas digitales. El riesgo disminuyó y las ganancias se multiplicaron.

El anonimato que brindan estas apps de reparto lo han aprovechado narcomenudistas debido a que no se exponen a ser reconocidos y el trato con sus clientes es impersonal. En otras ocasiones tercerizan los servicios y contratan a cuadrillas de personas que viajan en moto o en bici para realizar la entrega de su mercancía.

Venden de todo y usan las apps como servicio de paquetería: marihuana en todas sus versiones, desde brownies, paletas, dulces, pastillas, hasta los más elaborados que tienen que ver con frituras y mezcla de comida con el cannabis.

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Este modus operandi se afianzó durante la pandemia de Covid-19 por la entrega de alimentos y cualquier mercancía a domicilio. Incluso se crearon grupos de WhatsApp donde se ofertan estos productos a discreción, sin que el vendedor revele su identidad.

Publimetro confirmó cómo en redes sociales se distribuyen drogas y productos ilícitos; por ejemplo, la venta de drogas, packs y hasta armas de fuego. Cualquier puede acceder a estos productos, incluso si se es menor de edad, pues no se pide ningún requisito para la compra de los mismos.

Los catálogos de drogas como el del usuario que se autodenomina “Roberto Brownie Junior” varían los precios; van desde los 200 hasta los mil 500 pesos, en el que se ofertan desde pastelillos, otros comestibles y bolsas de papas.

Una vez que se elige el producto, los repartidores —que se distinguen por cargar grandes mochilas a sus espaldas de las empresas de reparto— esperan los mensajes de confirmación para trasladar dosis de cocaína y mariguana.

El número de repartidores en la CDMX se ha disparado en los últimos meses.

En otros casos la paquetería es otra vía que utilizan los narcomenudistas para distribuir su mercancía, en donde tampoco existen controles para saber con exactitud qué se vende y a quién llega. A través de sobres y cajas cerradas es como se comercializa este tipo de productos.

Consultados por este diario sobre este modus operandi, la Fiscalía General de la República (FGR) precisó que han detectado redes de personas que ofertan diferentes productos comestibles de marihuana, los cuales son elaborados de forma casera y sin filtros sanitarios.

Las autoridades del gobierno federal detallaron que esta mercancía es ofrecida incluso a menores de edad, por lo que una vez que es consumida se generan intoxicaciones, alteraciones en la percepción, ansiedad y pánico.

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Piratean mochilas

Con logotipos fake de empresas de Rappi, DiDi Food, Uber Eats, entre otras, trabajadores se ofrecen a trasladar productos de origen ilícito, esto con el objetivo de incrementar sus ganancias como repartidores.

Si bien las personas que se suben a la bicicleta o moto sí entregan comida en pedidos, los repartidores pirata se ofrecen para transportar estupefacientes e incluso drogas con tal de ganar un extra al día. En los autos la situación es similar, pues conductores de plataformas de transporte privado por aplicación también han sido utilizados para transportar paquetes ilegales de una ciudad a otra.

Los conductores incluso sin saberlo caen en esta situación para transportar paquetes de droga de un punto a otro de la ciudad; sin embargo, evitan denunciar los hechos por miedo a represalias por parte de los traficantes o tener algún problema con las propias autoridades.

Saúl Gómez, vocero del colectivo Ni Un Repartidor Menos, confirmó que han detectado este tipo de prácticas en algunos repartidores, debido a la facilidad que se tiene para adquirir mochilas de empresas de este giro; sin embargo, precisó que también existe una campaña en contra de este sector de la población.

La delincuencia siempre se va a camuflar de aquello que sea común. En el caso de los repartidores es fácil, pues las mochilas las consiguen en Facebook o las roban. Las autoridades a partir de ciertos incidentes en ocasiones se lanzan sobre repartidores.

—  Precisó en entrevista.

Datos:

  • Hasta en 500 pesos se llegan a ofertar mochilas con logotipos fake de Uber, Didi y Rappi.

Cero tolerancia

  • Uber expuso que la empresa tiene tolerancia cero ante el uso de la app para cometer cualquier tipo de delito, pues así lo establecen sus términos y condiciones, e incumplirlos puede derivar en la inhabilitación de una cuenta.

En Uber Eats expresamos nuestro rechazo al uso de artículos con nuestro logo para la presunta comisión de conductas delictivas. También exhortamos a los socios repartidores a reportar cualquier caso de robo o extravío de la mochila que han adquirido con el logo de Uber Eats. Reiteramos nuestra total disposición para colaborar con las autoridades ante investigaciones que así lo requieran.

—  Cecilia Román, gerente de Comunicación de Seguridad en Uber a Publimetro
  • En tanto, Didi expuso que condenan cualquier conducta que vaya en contra de las disposiciones jurídicas aplicables o que ponga en riesgo la seguridad e integridad de los usuarios.Destacó que en el servicio de Didi Entrega, exclusivo para mensajería, los usuarios son los responsables directos de las mercancías o paquetes.

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