El alza de bloqueos y retenes en carreteras federales por integrantes del crimen organizado y grupos de manifestantes a nivel nacional han ocasionado que se dispare el desperdicio de alimentos perecederos, que no alcanzan a llegar a centrales de abasto, negocios, mercados y supermercados. Esto provocó que mayoristas y particulares solicitaran al gobierno garantizar el libre tránsito de camiones que transportan este tipo de productos, pues en caso contrario proyectan una crisis en la red de distribución en las próximas semanas.
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De acuerdo con reportes de la Fiscalía General de la República (FGR), los bloqueos a carreteras por el narco y grupos delictivos en lo que va de este 2022 se incrementó 17% comparado con 2021, esto ha provocado que las cadenas de alimento se rompan y productos de primera necesidad caduquen y no terminen por llegar a su destino.
Mayoristas y representantes de centrales de abasto de la Ciudad de México, Guadalajara, Monterrey y Querétaro consultados por Publimetro precisaron que los alimentos principalmente afectados por el bloqueo de estas vialidades federales son productos básicos como el fríjol, el maíz, la harina, la sal y el azúcar. Esto, alertaron, podría impactar a los precios de estos alimentos en las próximas semanas.
En entrevista con este diario, Ana Leyva, Gerente Nacional de Programas de la Red de Bancos de Alimentos de México (Red BAMX), aseguró que en promedio se desperdicia al año en México 24 millones de toneladas de alimento, los hogares es uno de los lugares donde mayor se presenta esta problemática, le sigue los mercados públicos y centrales de abasto y por último negocios de comida y restaurantes a nivel nacional.
El problema es tal que esto equivale al 37% de la producción total, de acuerdo con datos del gobierno federal y es justamente en el campo o en el trayecto es en donde se desperdicia la mayor parte de los alimentos, debido a situaciones como el maltrato de la mercancía, caducidad de los alimentos condiciones climatológicas y bloqueos que impiden llegar en tiempo y forma a los camiones.
En este sentido, el desperdicio y desabasto de alimentos favorecen el crecimiento de los precios y genera un clima de incertidumbre en mercados y supermercados de todo el país, aseguró Julian Jiménez, quien pertenece al consejo de distribuidores de alimentos de la Central de Abasto en la Ciudad de México.
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“Tenemos mucho desperdicio, pero también hay desabasto por muchísimas razones, sin contar que los precios están por las nubes. En contraste tenemos muchos competidores que buscan con sus productos cerrar el mercado, aunque son únicamente envasados, comida chatarra y que no nutren”.
Bloqueos largos y cada vez más constantes
La FGR reporta que el promedio de tiempo de los bloqueos —en donde se ven afectados principalmente camiones y trailers de carga— en lo que va de este año es de 5 a 10 horas en promedio. La mayoría de estos son por manifestaciones de grupos de ciudadanos y en otro casos se deben a civiles armados que prenden fuego a llantas o autos para impedir el paso a una zona determinada.
Si bien las autoridades locales y federales niegan que exista desabasto de alimentos en todo el país por bloqueos carreteros, precisaron que los distribuidores de alimentos en diferentes estados denuncian que han elevado su gasto en gasolina, debido a que tienen que hacer más rodeos para llegar a su destino, por lo que consumen más combustibles y eso se refleja en los precios de los alimentos.
Incertidumbre por inseguridad
La falta de apoyo por parte de la administración pública y autoridades estatales y federales es otra de las razones para que no haya suficiente abasto de alimentos en comunidades alejadas y recientemente en importantes ciudades, alertaron empresarios y mayoristas.
Y es que cerca de 35% de todos los alimentos preparados y producidos en México se tiran a la basura, el nivel de desperdicio puede llegar hasta un 40% si se trata de carnes blancas como el pollo y el pescado y un 37% para la carne de res, debido a diferentes factores externos y que los agricultores y compradores de la mercancía no controlan.
Por sí solas la Ciudad de México, Monterrey y Guadalajara son responsables de gran parte del desperdicio de alimentos en un país en el que cerca de 50 millones de mexicanos tienen problemas para acceder a la canasta alimentaria. El problema se debe a que la mayoría de agricultores, dueños de negocios y personas tiran la comida por la estética de los productos, daños en su empaque o presentan diferentes coloraciones.
Datos:
- Un estudio de Línea Basal de Pérdidas y Mermas de Alimentos determinó que anualmente en el país se desperdicia casi el 60% de leche de vaca; 29% de tortillas, 45% de pan, 39% de carne de pollo y 37% de huevo.
- Solo la CDMX tira a la basura cerca de 13 mil toneladas de comida a diario, mientras que casi 15% de la población que habita la urbe presenta alguna carencia alimentaria.
- El desperdicio de comida a nivel nacional en términos económicos representa una pérdida de 400 mil millones de pesos.
A considerar:
- Una vez que llega a puntos de procesamiento o venta, los productos deben cumplir con ciertas características de tamaño y/o peso, lo que abre una ventana adicional al desperdicio.
- Si se trata de productos que llegan directamente al punto de venta, entra en juego la estética de los alimentos, pues existe una tendencia a preferir productos perfectos, y los que visualmente no lo son (aunque ello no comprometa su inocuidad), se desechan por ser productos feos. En el caso de productos que pasan por algún procesamiento, también existe un porcentaje de pérdidas alimentarias.
Fuente: Red de Bancos de Alimentos de México (Red BAMX)
