Las destrucciones de plantíos de droga realizadas por el ejército mexicano disminuyeron en los últimos tres años: 55% las de amapola y 52.6% las de marihuana, así lo revelan reportes de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
En el último trienio de la administración de Enrique Peña Nieto –2016-2018– se eliminaron 572 mil 603 cultivos de amapola; mientras que en el periodo 2019-2021 solo se acabó con 258 mil 51 campos.
Respecto a los plantíos de marihuana, en el mismo periodo del priista el registro alcanzó las 107 mil 541 destrucciones por parte de la Sedena, para después caer a 51 mil 34 en el citado lapso.
Ha decaído el hacer frente al combate contra el narcotráfico en territorio nacional, aseveró a Publimetro Arturo Argente Villarreal, director de la Escuela de Ciencias Sociales y Gobierno del Tec de Monterrey Campus Toluca.
Este sexenio, agregó el académico, quedará en la historia como una administración más que falla en su estrategia de seguridad nacional.
El crimen organizado es un problema viejo, abundó, el cual se desarrolla, consolida y perfecciona año con año, así como se infiltran en todo el sector corporativo del país.
“La raíz que sostiene este árbol llamado narcotráfico se sigue engrosando y se sigue consolidando por debajo de la tierra. No será ni el siguiente presidente ni la siguiente administración capaz de darle una solución a este problema que tal vez nos lleve décadas encontrarle una solución”, señaló Arturo Argente.
Récords no presumibles
Durante el último trienio se observan los registros anuales más bajos de la pasada década sobre dichos ‘golpes’ del ejército mexicano: en 2021 solo siete mil 247 plantíos de marihuana destruidos y en 2019 únicamente 80 mil 511 campos de amapola eliminados.
Por el contrario, los más altos se dieron en 2014 con 47 mil 383 plantíos de marihuana erradicados y en 2018 con 207 mil ocho campos de amapola suprimidos.
Ningún grupo delincuencial tiene mayores facultades que las Fuerzas Armadas, entonces, la deficiencia se encuentra en la estrategia del gobierno federal y no en las capacidades de la Secretaría de la Defensa Nacional, precisó el profesor del Tec de Monterrey. Agregó que se requiere se suficiente inteligencia para enfrentar este fenómeno, indicó.
El plan de la presente administración es atender las causales del narcotráfico, es decir, el origen por el cual los jóvenes se involucran en el crimen organizado, la pobreza, explicó Argente Villarreal. No obstante, es el argumento con el cual se escudan y maquillan su fracaso, sentenció.
“¿Cómo van a atender las causas cuando hay un incremento en la pobreza a nivel nacional? La migración se sigue desarrollando en la parte norte y sur de nuestra nación y seguimos viendo que la pobreza se extiende. Me gustaría entender cómo ha influido la estrategia del gobierno federal en las causas para atender el narcotráfico. Lo único que sale en cada mañanera son palabras, los hechos son abrumadores”, dijo.
En total, 680 mil 144 campos de droga se destruyeron en el cierre de la gestión de Enrique Peña Nieto, cantidad superior en 54.6% a lo enlistado en el último trienio, 309 mil 85 plantíos eliminados.
Para atender el problema del narcotráfico en México se necesita una estrategia de seguridad, atender el sistema de justicia y mejorara la procuración de justicia; también se requiere un compromiso entre todas las áreas involucradas en la protección ciudadana, concluyó el académico.