Después de cinco años se reunió de nueva cuenta el Consejo Nacional de Vivienda del gobierno federal en donde se dieron cita académicos, funcionarios, empresarios y diputados federales, quienes dieron a conocer un panorama general sobre la situación de vivienda en México. Román Meyer, secretario de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), aseguró que más de un millón de viviendas se recuperaron y salieron del rezago.
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Sin embargo, durante la primera sesión ordinaria 2022 se reveló que el panorama de compra de casas en general se ha complicado en todo el país, pues los jóvenes que buscan adquirir una vivienda ahora tienen que destinar hasta 50% de su salario mensual, una deuda que supera los 15 años o más, lo que a mediano plazo genera que no se termine por pagar la hipoteca.
En medio de una inflación histórica en el país y la crisis que dejó la emergencia sanitaria por Covid-19, la diputada federal del PAN, Carmen Rocío González Alonso, alertó que las generaciones de trabajadores y empleados de toda la República mexicana tienen que comprometer su sueldo hasta por 30 años para que se puedan hacer de un patrimonio.
La legisladora dio a conocer que el costo promedio de un departamento a nivel nacional ronda entre los 600 mil a un millón de pesos; sin embargo, en zonas como la Ciudad de México y otras urbes la cifra se duplica o triplica, lo que ha hecho que el sueño de adquirir una casa en estos sitios sea casi una tarea imposible.
Para dimensionar como han aumentado los precios, por ejemplo, a finales del siglo pasado se necesitaba el 30% de un sueldo promedio durante 5 a 10 años para poder comprar una casa en el país; no obstante, en la actualidad, es necesario pagar hasta el 50% de dos sueldos promedio durante 30 a 50 años para poder comprar un inmueble en la Ciudad de México.
Y es que el salario promedio en México es de siete mil pesos al mes y en donde el precio mínimo de una vivienda, según la región, es de 600 mil pesos a 1.2 millones de pesos. Al respecto, de acuerdo con el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) se debería destinar máximo el 30% de los ingresos en vivienda, incluyendo agua, luz, mantenimientos y renta.
Sueño casi imposible
Alrededor de un 60% de los interesados en adquirir un crédito hipotecario, son millenials, una tendencia que se prevé continúe en aumento los próximos años, pues esta generación, al convertirse en la mayor parte de la fuerza laboral a nivel mundial, seguirá adelante con su interés por adquirir una propiedad, esto de acuerdo con la comercializadora inmobiliaria Qaya.
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Aunque existen factores que pudieran detenerlos en su intento por conseguir dicha independencia, dadas sus condiciones laborales, pues gran porcentaje de esta fuerza laboral es freelance o tienen contratos temporales.
Datos:
- 80% de los mexicanos que tiene una edad de entre 20 a 40 años no podrán comprar una casa nunca, debido al encarecimiento de los inmuebles y los bajos salarios en el país.
- Para comprar una casa de un millón, un mexicano tiene que ganar al menos 25 mil 500 pesos para poder conseguir la aprobación de un crédito cuyas mensualidades ronden entre los siete mil a los nueve mil pesos.
Fuente: Vivancos.
Déficit de vivienda popular
- En el país se necesitan construir 800 mil viviendas por año en dos décadas, para romper con la brecha de vivienda existente, así lo señaló el estudio ‘Reflexiones en torno a la Evolución del Mercado de la Vivienda: Sueños y Realidades’.
- En 1990, el tamaño medio de los hogares era de cinco personas, en la actualidad esto disminuyó a 3.6. Esta tendencia continuará durante los próximos 20 años llegando a alcanzar una cifra de 3 personas por casa, señaló el estudio.
- En México existen 650 mil casas en el abandono y por el otro un déficit de viviendas nuevas, señaló el titular del Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit), Carlos Martínez Velázquez.