Lorenzo Córdova, consejero presidente del Instituto Nacional Electoral (INE), confió en que los tribunales en los que se presentaron recursos legales en contra de la reforma electoral, conocida como Plan B, fallen en contra de ella y sea echada abajo para no alterar el orden democrático que se han vivido en los últimos años.
“Por el bien de la democracia y nuestras elecciones, ojalá que los tribunales reinstauren el orden constitucional y democrático que se vio alterado con esta reforma, conocida como Plan B, y nos permita a los mexicanos seguir gozando de muchos años de estabilidad política, elecciones autenticas y paz pública”, dijo en un video publicado en redes sociales.
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Córdova dijo que en dos semanas se cumplirán nueve años del nacimiento del INE, que sustituyó al Instituto Federal Electoral (IFE), a partir de la reforma electoral de 2014 para que el nuevo instituto electoral se encargara de organizar las elecciones en todo el país de los tres niveles de gobierno en coordinación con los instituto locales.
Por dicho motivo, dijo que es necesario evaluar el trabajo del INE en sus nueve años, entre ellos organizar 331 procesos electorales federales y locales, elecciones ordinarias y extraordinarias, los dos primeros ejercicios de participación ciudadana a nivel nacional, dos proceso para elegir las dirigencias del PRD y de Morena, una elección para elegir a los integrantes de la Asamblea Constituyente de la Ciudad de México en 2016.
“En todos estos años no ha habido conflictos poselectorales, estos nueve años han sido el periodo más largo de estabilidad y gobernabilidad democrática de toda nuestra historia. Litigios ha habido, sin duda, pero siempre por los cauces institucionales legalmente establecidos para atenderlos, es decir, ante los tribunales y no se ha dejado de cumplir con alguna de las sentencias emitidas”.
Lorenzo Córdova añadió que durante la existencia del INE se consiguió la mayor alternancia política en el país, a nivel federal alcanza 62% y a nivel estatal casi 70, así como en las elecciones de 56 gubernaturas, en 39 de ellas hubo cambio de partido político.
“Estos datos demuestran que el sistema electoral que tuvimos hasta el momento funciona y el Plan B altera radicalmente, pone en riesgo la operación del INE y autenticidad de las elecciones. El sistema que tuvimos ha funcionado muy bien”.
