El robo de mercancías en México representa un reto que requiere una estrecha colaboración entre los sectores público y privado, así como una inversión continua en tecnologías de seguridad innovadoras. Sólo a través de un enfoque integral que combine tecnología, análisis de datos y colaboración se podrán proteger eficazmente las cadenas de suministro y mitigar los riesgos asociados a este tipo de delitos.
Señaló lo anterior la empresa de software de gestión de riesgos y visibilidad de la cadena de suministro Overhaul, quien destacó que los alimentos y bebidas lideran las cifras en robo de transporte de mercancías durante el primer semestre de 2024 con 31%, seguidos del sector construcción e industrial con 17% y posteriormente se ubica misceláneos con 9%, el resto 43%, se divide en el rubro de ‘otros sectores’.
Al comparar estos datos con los del primer semestre de 2023, se detectaron aumentos significativos en varias categorías; los productos de construcción e industriales, por ejemplo, experimentaron un aumento de dos puntos porcentuales, con el cemento, pisos y azulejos, y varillas como los artículos más robados.
En el caso de los productos químicos, los robos aumentaron tres puntos porcentuales, siendo el polietileno y los detergentes, los principales objetivos de los delincuentes. Además, las categorías de automóviles y repuestos, agro, alcohol y productos farmacéuticos también experimentaron un aumento de un punto porcentual cada una.
Recomendaciones de seguridad
Para mitigar estos riesgos, se recomienda que las unidades de carga que transiten por el país utilicen una combinación de medidas de seguridad físicas y electrónicas. Es aconsejable que el transporte se realice preferentemente durante las horas del día, ya que la visibilidad y la actividad diurna pueden disuadir a los delincuentes.
Las medidas de vigilancia electrónica, como el uso de GPS y otras tecnologías avanzadas, son cruciales para reducir el riesgo para la carga, permitiendo una respuesta más eficaz
Estrategias para mejorar la seguridad
Las empresas deben considerar la implantación de plataformas de supervisión de riesgos que integren a los distintos agentes de la cadena de suministro. Estas plataformas garantizan que todas las partes implicadas estén en comunicación constante, facilitando alertas oportunas en situaciones de riesgo.
El uso de análisis de datos avanzados también es fundamental para identificar patrones de riesgo y planificar rutas más seguras. Al aprovechar los datos de diversas fuentes, como el seguimiento por GPS, los datos meteorológicos y los datos históricos sobre delitos, las empresas pueden identificar las zonas y rutas de alto riesgo y tomar las medidas preventivas adecuadas.
