El coordinador de Morena en la Cámara de Diputados, Ricardo Monreal, adelantó que será la próxima semana cuando se presente la iniciativa para reducir la jornada laboral a 40 horas semanales, luego de que ayer fue mencionada por la presidenta Claudia Sheinbaum, entre una de sus 100 propuestas de gobierno en el Zócalo capitalino.
En entrevista, en San Lázaro, indicó que se presentará una nueva propuesta luego de que en la legislatura pasada Movimiento Ciudadano, presentó una, la cual se discutió en comisiones, pero no llegó al pleno de la Cámara.
La propuesta plantea establecer dos días de descanso (actualmente es uno) por cada cinco días laborados (la legislación permite seis) por semana. Este cambio se traduciría en términos prácticos en una reducción de 48 a 40 horas en el límite legal de tiempo de trabajo semanal.
Al respecto, Sara Arteaga, representante del Frente Nacional Yoporlas40horas, indicó en entrevista con Publimetro que el anuncio realizado por Morena es un gran avance, ya que actualmente la Ley Federal del Trabajo establece un día de descanso por cada seis días de trabajo laborado.
Explicó que esto significará mayor bienestar para los trabajadores mexicanos, porque de acuerdo con la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) existen más de 10.3 millones de personas que exceden este límite de 48 horas por semana. De ellos, 5.1 millones de personas superan las 11.2 horas diarias de jornada laboral.
Claudia Sheinbaum da luz verde
La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo expresó este lunes en el Zócalo de la Ciudad de México su confianza para reducir la jornada laboral de 48 a 40 horas a la semana y anunció que, en acuerdo con los empleadores, se implementará gradualmente durante el sexenio la reducción de la jornada laboral a 40 horas semanales.
“Compromiso 60. Estoy segura que lo vamos a lograr: En acuerdo con las y los empleadores iremos alcanzando paulatinamente en el sexenio las semana de 40 horas”, expuso.
Asimismo, la Presidenta de México también se comprometió a que el aumento al salario mínimo continuará y aseguró que la reforma para mejorar las pensiones será aprobada.
La experiencia de otros países
En Chile, por ejemplo, si bien su Código de Trabajo fue modificado en 2023 para reconocer una jornada de trabajo de 40 horas semanales, el proyecto original fue planteado desde el 2017 e incluyó una transición de cuatro años, misma que comenzó este año.
En Colombia, otra economía latinoamericana que redujo su tiempo de trabajo, se siguió una ruta similar. En 2021 se aprobó la reducción de la jornada laboral, pero fue hasta el 2023 cuando inició su transición, la cual concluirá en 2026.
Al respecto, la Organización Internacional del Trabajo (OIT) en su recomendación 116, vigente desde hace poco más de 60 años, sugiere las siguientes claves para reducir la jornada laboral (idealmente a 40 horas semanales):
- Debe ser progresiva y sin reducir sueldo.
- Se puede realizar por vía legislativa, reglamentaria o por contrato.
- El proceso debe considerar las circunstancias de cada país y de cada sector, esto incluye el nivel de desarrollo de la nación, los progresos obtenidos con la implementación de tecnología y la necesidad de elevar el nivel de vida de la población.
- El principio de progresividad puede aplicarse en el tiempo, por rama o sector, o cualquier otra fórmula más apropiada a las condiciones del país.
- Dar prioridad a las industrias o actividades con un esfuerzo físico o mental especial o con riesgo para la salud de las personas trabajadoras.
- La autoridad de cada país debe determinar en qué circunstancias y dentro de qué límites podrán autorizarse excepciones a la duración normal del trabajo.
Reducción de horas podría disparar inflación
El diputado de Morena, Pedro Haces, advirtió que la reducción de la jornada laboral de 48 a 40 horas podría tener repercusiones en los precios que los consumidores deben pagar. En un breve encuentro con medios de comunicación, Haces enfatizó que las empresas se verían obligadas a pagar más horas extras, lo que podría trasladarse a los precios finales de los productos y servicios.
“La gente quiere ganar mejor, no descansar más”, afirmó el legislador morenista, por lo que sugirió que, en lugar de imponer una jornada laboral uniforme, debería considerarse la opción de que cada trabajador elija entre laborar 40 o 48 horas.
De acuerdo con el diputado, si la reducción a 40 horas se implementara de manera generalizada, las empresas tendrían que contratar horas extra, lo que incrementaría los costos operativos. “Esas horas extras no las va a asumir el empresario que producen las cosas, se les va a trasladar en precio al consumidor”, recalcó. Haces recordó que en la legislatura pasada, durante los foros sobre la reforma laboral, fue la única central obrera que se opuso a la reducción de jornada debido a las posibles implicaciones inflacionarias.
“Hay que pensar en nuestro país. Si no conviene una inflación para México en este momento, lo que conviene es que tengamos crecimiento en materia económica”, argumentó Haces. Con una expectativa de crecimiento entre un 5% y un 8% en los próximos años, según el diputado, es vital cuidar de los intereses tanto de los trabajadores como de las empresas.
