Un aparente “campo de exterminio” fue localizado en las afueras de la ciudad de Nuevo Laredo en la frontera norte de México, informaron autoridades federales.
El lugar fue ubicado hace algunas semanas y está siendo investigado en el marco de las docenas de desapariciones reportadas desde 2012 a lo largo de un tramo de la carretera que une la ciudad de Monterrey con Nuevo Laredo, explicó la Comisión Nacional de Búsqueda en un comunicado.
“Las características del lugar parecen inferir que es un campo de exterminio que ha sido utilizado desde hace años y hasta fechas muy recientes, lo cual tendrá que ser confirmado pericialmente. Este es el primer sitio de estas dimensiones que se localiza en Nuevo Laredo”, señaló la CNB.
En la zona se recuperaron “restos humanos calcinados a nivel de superficie, un posible crematorio clandestino y la presencia de posibles fosas clandestinas”, agregó.
El crimen organizado ha usado a menudo terrenos para quemar o disolver cuerpos de sus víctimas.
Ubicado junto a Laredo, Texas, Nuevo Laredo ha sido desde hace años un territorio dominado por el Cártel del Noreste, una facción del antiguo cártel de Los Zetas.
Angélica Orozco, que encabeza el grupo de familiares Fuerzas Unidas por Nuestros Desaparecidos en Nuevo León, el estado que colinda con Nuevo Laredo, dijo que “es muy preocupante para nosotras que salga la CNB con estas declaraciones tan alarmistas sin información”.
Al menos 71 personas desaparecieron este año mientras conducían por la autopista Monterrey-Nuevo Laredo. Entre las víctimas hay al menos media docena de estadounidenses.
Muchos de los desaparecidos en la carretera son hombres que conducían camiones o taxis por el camino al que la prensa local llama “la carretera de la muerte”. Pero también hay mujeres, niños y hombres que manejaban vehículos privados.