El Consejo Coordinador Empresarial (CCE) advirtió que la reforma eléctrica, promovida por el presidente Andrés Manuel López Obrador, puede ser frenada en los tribunales; a través de amparos promovidos por las empresas que resulten afectadas y litigios internacionales permitidos por las reglas del T-MEC.
El presidente del organismo, Carlos Salazar Lomelín, señaló que –de ser aprobada por el Congreso mexicano- la reforma eléctrica entraría en un proceso de judicialización; porque plantea el desconocimiento y cancelación de contratos vigentes en el sector eléctrico.
“En México no puede aplicar una ley en retroactivo y los contratos se firmaron en función de una cierta regulación y una cierta normativa; por lo que cambiarlos o cancelarlos –como propone la iniciativa constitucional del presidente- evidentemente va a acabar siendo una discusión en el Poder Judicial”, dijo.
El presidente del CCE explicó que la reforma eléctrica del presidente López Obrador, que modifica los artículos 25 y 27 de la Constitución del país, violenta el artículo 14.8 del T-MEC; donde se prohíbe la expropiación directa o indirecta de las inversiones de empresas estadounidenses o canadienses.
Por lo que, de no respetar esto último –a través de la reforma- México estaría obligado a compensar el daño; abriendo a la inversión privada otros sectores de las mismas dimensiones que el eléctrico; o bien pagando aranceles por el incumplimiento a las reglas de inversión del dicho acuerdo comercial.
Impactos de la reforma
El CCE infirmó que, de ser aprobada por el Congreso, la reforma eléctrica provocará:
- Aumentos de 10% a 100% las tarifas que pagan los consumidores; que obligarían a las empresas a encarecer los productos y servicios que consumen los mexicanos.
- Costos altos en la generación de electricidad; que duplicarían el gasto que realizan las empresas generadoras privadas, que abastecen 46% del consumo eléctrico nacional.
- En las empresas privadas el costo de producción es de 700 pesos y, con la reforma, este subiría al nivel que hoy maneja la CFE, de mil 403 pesos por megawatt hora.
- Mayor emisión de contaminantes a través de las plantas de la CFE, que recupera el monopolio del sector; y que privilegia el uso de combustibles fósiles y carbón para la generación de electricidad. Además de la consecuente anulación de la energía limpia; como la electricidad eólica o fotovoltaica.
- Mayor riesgo de apagones en el país; debido a que la CFE apenas cuenta con una capacidad de reserva eléctrica de 15% a 20%; cuando el país necesita por lo menos 30%, para evitar cortes de luz en el territorio mexicano.